Miembro del Consejo Académico de Libertad y Progreso. Licenciado en Economía por la Universidad Católica Argentina. Es consultor económico y Profesor titular de Economía Aplicada del Master de Economía y Administración de ESEADE, profesor titular de Teoría Macroeconómica del Master de Economía y Administración de CEYCE.
CFK acaba de afirmar que la palabra cepo para las medidas cambiarias no da. Si leyera el diccionario advertiría que sí da, pero en todo caso podemos cambiar cepo cambiario por violación a los derechos de propiedad.
Según Cristina Fernández de Kirchner, cepo cambiario es un invento de los medios de comunicación y, a renglón seguido, sostuvo que no hay cepo cambiario.
Según CFK “Van a tener que encontrarle otro título mediático, porque cepo no da”, porque según ella, “el cepo era un instrumento de tortura del siglo XIX que fundamentalmente refleja la inmovilidad”.
Si uno toma la definición de CFK, en rigor cepo cambiario cabe como anillo al dedo a las medidas adoptadas por el gobierno porque es un instrumento de “tortura” económica al no permitirle a la gente defender el fruto de su trabajo comprando dólares como reserva de valor dado que el peso no sirve para eso. Inmovilizan a la gente en pesos para que tengan que pagar más impuesto inflacionario.
De todas maneras, aquellos que le tiran frases cohete para que diga en sus discursos, por lo menos podrían revisar el dicción de la Real Academia Española para evitarle a la presidente quedar en ridículo con sus afirmaciones.
En efecto, el diccionario de la RAE da por lo menos 10 definiciones de cepo.
1. m. Instrumento hecho de dos maderos gruesos, que unidos forman en el medio unos agujeros redondos, en los cuales se aseguraba la garganta o la pierna del reo, juntando los maderos.
2. m. Instrumento para devanar la seda antes de torcerla.
3. m. Artefacto de distintas formas y mecanismos que sirve para cazar animales mediante un dispositivo que se cierra aprisionando al animal cuando este lo toca.
4. m. Instrumento que sirve para inmovilizar automóviles aparcados en zona prohibida.
5. m. cepillo (‖ caja para limosnas).
6. m. Instrumento de madera con que se amarra y afianza la pieza de artillería en el carro.
7. m. En cafés, hoteles y otros lugares de pública lectura, utensilio compuesto de una o dos varillas de madera o metal, que sirve para sujetar los periódicos y revistas sin doblarlos.
8. m. gajo (‖ rama de árbol).
9. m. Madero grueso y de más de medio metro de alto, en que se fijan y asientan la bigornia, yunque, tornillos y otros instrumentos de los herreros, cerrajeros y operarios de otros oficios.
10. m. Arq. Conjunto de dos vigas entre las cuales se sujetan piezas de madera, como los pilotes de una cimentación.
Como puede verse, sus libretistas no leyeron el diccionario o solo eligieron la primera definición que es la que justamente le cabe a la medida adoptada por el gobierno en materia cambiaria.
La idea “mediática” del cepo cambiario es transmitir que la gente quedó atrapada en pesos que se deprecian sin poder acceder a dólares para poder defenderse de la inflación. Tampoco las empresas pueden girar utilidades y dividendos ni se pueden comprar dólares para comprar dólares para viajar sin la autorización previa de la AFIP, la cual no puede determinar si el contribuyente está en orden con sus cuentas ante la AFIP o no porque, en todo caso, estaría basándose en datos del ejercicio fiscal del año anterior y no del actual con los cuales sí puede justificar la compra de divisas.
También CFK sostuvo que cualquier limitación tiene que ver con que los potenciales compradores “tienen los papeles flojos”. Justo desde el gobierno vienen a hablar de papeles flojos cuando el escándalo Ciccone, su aumento patrimonial en 10 veces desde 2003, las valijas de Antonini Wilson y ahora un proyecto de ley de presupuesto por el cual le perdonarían a Aerolíneas Argentinas sus obligaciones fiscales y liberarían a sus directores de la responsabilidad de cumplir con las obligaciones fiscales dejan fuertes dudas sobre la solidez de los papeles de funcionarios oficiales.
CFK también dijo que vio en Nueva York un montón de argentinos, por lo tanto no hay tal restricción para viajar. ¿Y si quienes viajaron tenían dólares ahorrados antes del cepo cambiario y con eso viajaron? ¿Cómo sabe ella de dónde sacaron los dólares los que viajan al exterior?
En síntesis, si la palabra cepo no le gusta, aunque el diccionario la convalida para este caso de medidas cambiarias, puedo sugerirle otra: violación a los derechos de propiedad y expolición impositiva.
