El ministro de Educación Esteban Bullrich hizo pública una lapidaria verdad: “la mitad de la adolescencia del país, o bien no cursa el nivel secundario, o bien abandona los estudios medios en forma temprana. Sólo 1 de cada 10 jóvenes concluye los estudios universitarios y sólo 1 de cada 100 proviene de los sectores más pobres”.
Recientemente se conocieron e nuestro país los datos de la pobreza. El dato en sí mismo es toda una curiosidad a nivel internacional. Es que si bien la mayoría de los países cuenta con un ente estadístico nacional que elabora este tipo de relevamientos, el INDEC argentino está en pleno proceso de reconstrucción, luego de años de manipulación política y pérdida de credibilidad.