Hay que acelerar la reforma educativa
Por Agustín Etchebarne | La verdadera solución es cambiar radicalmente la forma de enseñar. Una revolución que permita desarrollar las habilidades necesarias para el siglo XXI, la imaginación, la inteligencia emocional, la inteligencia espiritual, la investigación, el trabajo en equipo, las artes, la música, la danza, la inteligencia cinética, además de las tradicionales, como verbal y las matemáticas.