JUJUY AL MOMENTO – Al término de la gira por el continente asiático, los principales medios del país reflejan que el presidente Mauricio Macri y la delegación argentina que lo acompañó se vuelven con promesas de inversión por más de 15 mil millones de dólares en distintas áreas del país.
De hecho, Jujuy será uno de los sitios donde se desplegará un importante proyecto financiado por el gigante asiático.
Sin embargo, hay opiniones que se muestran más cerca del refrán que reza “ver para creer”.
Parece ser el caso del director de la fundación Libertad y Progreso, Aldo Abram, quien visitó Jujuy durante el fin de semana en el marco del dictado de talleres en la región, destinados a comprender economía en términos sencillos, orientados hacia el ciudadano promedio.
Al ser consultado por la prensa local, en un coffe break durante uno de sus talleres, Abram sostuvo que hay que manejar la ansiedad.
“Solemos entusiasmarnos cuando nuestros presidentes viajan y anuncian inversiones; si medís todas las inversiones que había acordado Cristina Kirchner durante su paso por la presidencia hoy ni Estados Unidos nos alcanza”, ironizó.
“Cuando se reúnen muestran buenas intenciones pero a la hora de concretar las inversiones observan el contexto”, dijo el economista.
Según Abram, hay 128 países en el mundo que ofrecen mejores condiciones a los inversores que la Argentina y remarcó que la carga impositiva del país es el principal obstáculo para la llegada de inversiones.
“La realidad es que los políticos nos exprimen como naranjas, construyeron un estado mounstroso e inútil que no le sirve a nadie”, afirmó.
“Un trabajador que paga ganancias trabaja la mitad del mes para pagar impuestos”, argumentó a modo de ejemplo.
La fundación que dirige organizó talleres denominados “Claves para interpretar la Argentina”, y se propuso explicar en términos comprensibles para el ciudadano sin formación técnica en economía, cuáles son los conceptos esenciales para comprender la situación del país.
En ese marco, comentó en línea con el gobierno que la recesión ha comenzado a revertirse a partir del tercer trimestre de 2016, aunque ese proceso es lento e imperceptible en la mayoría de los casos por el enorme gasto que supone financiar el estado.
En ese punto es que intentan introducir su mensaje. “Tratamos de formar ciudadanos, informarlos para que voten mejor y para que controlen al gobierno que ha votado, si no están formados no tienen esa capacidad de exigir”, sostuvo.
