En el marco del Ciclo de Desayunos de la Fundación Libertad y Progreso, realizado en el Hotel Feirs Park con auspicio de la Fundación Naumann y RELIAL, los directores de la organización, Agustín Etchebarne, Aldo Abram y Manuel Solanet, analizaron el panorama de la economía argentina y mundial después de las elecciones primarias. Este desayuno también fue ocasión del lanzamiento del video “La Gran Raviolada”, sobre la enorme e ineficiente estructura del estado (para ver, hacer click acá)
“El Gobierno está hablando de una reforma impositiva y eso es muy bueno, pero hay que tener en claro que no hay reforma posible si no encaramos una reducción sensible del gasto público y una reducción de la inmensa estructura del Estado. No se puede bajar impuestos si no bajamos el nivel de gasto”, señaló Manuel Solanet, director de Políticas Públicas de la fundación.
Según Solanet, al Gobierno le esperan cuatro grandes desafíos después de las elecciones de Octubre: la reducción del gasto con la consecuente reducción del tamaño del Estado; la reforma laboral, que se volvió más urgente a partir de la aplicada por Brasil; el combate a la inflación y la apertura externa.
“El más urgente de los desafíos es la reducción del gasto público y el déficit. Argentina está lidiando con un déficit fiscal de entre el 7 y 8 puntos del PBI y un poco mas si se considera el deficit cuasifiscal. Esto es preocupante, el endeudamiento está aumentando fuertemente. El mundo de los inversores mira con atención, ya que si bien miran con optimismo el rumbo político miran con reservas el panorama económico. Y la única forma de bajar el déficit es achicando gasto público”, señaló Solanet.
“¿Cómo y hasta dónde se puede bajar el gasto? Hay partes sumamente rígidas, como las jubilaciones. Pero se puede avanzar en el ajuste de las tarifas de transporte y energía, en forma gradual y explicando bien lo que se hace. En esto hay temor de parte del Gobierno por la reacción que tuvo la gente ante los primeros aumentos. Pero es un frente donde hay que actuar, haciendo concesiones a los que no pueden pagar, por ejemplo a través de algún mecanismo como la tarjeta SUBE. Lo que no puede ser es que los que tienen cómo pagar tengan el pasaje o la energía subsidiados”, señaló.
“Otro lugar donde achicar el gasto es el empleo público, que tuvo un crecimiento muy fuerte en el kirchnerismo hasta llegar a cuatro millones de empleados públicos. Así tenemos una administración pública enorme. Nosotros proponemos una reforma grande, achicando la cantidad de reparticiones y empleados de una sola vez, con los efectos amortiguados en el tiempo, pagando a los empleados cuyos cargos se eliminen por dos años, incentivando su pase al sector privado y capacitandolos en el proceso. Esto se puede hacer amortiguando el impacto”, acotó Solanet.
“Otro lugar donde se puede achicar el gasto es en los planes sociales. Nosotros propusimos ir transformándolos gradualmente en trabajo, haciendo que el monto de los planes pueda ser parte del sueldo de esa persona si lo toma una empresa. Esta idea la tomó el Gobierno con el Plan Empalme”, destacó Solanet.
Finalmente, el economista puntualizó la necesidad de que las provincias vuelvan a ser responsables de lo que gastan y recaudan, recuperando potestades tributarias. “Con el sistema actual, la Nacion tiene el costo político de recaudar y las provincias el beneficio de gastar. Con nuestra propuesta, el gobernador que quiera gastar más va a tener que recaudar más y cada provincia va a ser responsable de lo suyo, pero sabrá que si impone demasiados tributos va a perder empresas e inversiones”, dijo.
Inflación y burburjas en el mundo
Seguidamente, Aldo Abram pintó el panorama económico local, destacando como problema las dificultades que está teniendo el Banco Central para controlar la inflación y cumplir con las metas fijadas. “Ahora muchos festejan que subió el tipo de cambio, el pequeño problema es que eso pasa a los bienes de la góndola y más tarde, a los servicios. O sea genera más inflación. Y en unos meses vamos a tener de nuevo el dólar atrasado. Es como un perro que se muerde la cola”, explicó Abram.
“Resulta que como a los tres niveles del Estado no les alcanzó para pagar su derroche todo lo que hizo el Central ni todo el crédito doméstico que se chupó el Estado, las provincias y la Nación salieron a tomar deuda, tiramos esos dólares en el mercado doméstico, eso hizo caer al dólar, entonces le pedimos de nuevo al Central que emita para comprar dólares y volvió a emitir. Y con todo esto que pasó encima pretendemos que el Banco Central cumpla las metas de inflación. Olvídense. No va a pasar. No está pasando”, explicó el economista. “Hay que atacar el problema por otro lado, por el lado del déficit”, acotó Abram.
A su turno, Agustìn Etchebarne analizó como juega la economía del resto del mundo en este panorama. “En mi opinión el Gobierno tiene que empezar las reformas cuanto antes, ahora tiene una ventana para hacerlo de noviembre a julio del año que viene, después va a ser difícil y no se sabe que puede pasar en materia internacional que lo condicione”, dijo.
Para Etchebarne, estos son los principales hechos del mundo que pueden influir en el futuro del país:
*”El mundo está en una etapa de crecimiento suave, a partir de la salida de la recesión de 2008″
*”EEUU crece un poco mas rápido el año que viene. Europa crece menos pero al menos está corrigiendo el problema fiscal”
*”Japón tiene por su lado todavía déficit alto y mucha deuda. Viene recortando el déficit de a poco”
*”China venía creciendo mucho, y ahora crece como la India, tiene problemas serios de déficit. Por otro lado los préstamos a las empresas privadas de ese país aumentaron, equivalen al 170% de PBI de China. El aumento es aceleradisimo. Y con esta plata se están comprando todo, están en un rally mundial de compras, por ejemplo en Canadá, Nueva Zelanda, Australia, donde generan mini burbujas”.
*”Las tasas siguen muy bajas, no hay serios problemas mientras sigan así”
*”Si miramos el precio de los inmuebles de EEUU, hoy en términos reales estamos en nivel igual a 2008. Tantos años de tasas interés bajas te generan muchas burbujas y no sabemos cual va a estallar. Si además miramos el estado patrimonial de EEUU en 16 años, el gasto más que se duplicó, la recaudación cayó, la deuda pública subió”
Con este panorama, Etchebarne insistió en la necesidad de que el Gobierno encare las reformas pendientes cuanto antes. “Si Argentina no encara las reformas rápido, vamos a ser mas sensibles a los cimbronazos del mundo por el nivel de endeudamiento que tenemos, y hay muchas burbujas potenciales que pueden explotar”