EL DÍA – La suba de la tasa de Política Monetaria dispuesta el martes por el Banco Central fue criticada ayer por la ex presidenta y senadora electa, Cristina Fernández de Kirchner, y por la ex titular de esa entidad monetaria, Mercedes Marcó del Pont, en tanto economistas pusieron en duda que la medida resulte suficiente para cumplir con la meta de inflación para el año que viene.
Sin embargo la suba de las tasas no afectó mayormente el valor del dólar que arrancó la jornada con una fuerte baja, pero que a lo largo de la rueda se fue acomodando y terminó a $ 17,76 para la venta minorista en los principales bancos y casas de cambio porteños, donde se destacó el alto nivel de negocios que alcanzó los 856,6 millones de dólares.
A través de una serie de mensajes en su cuenta de Twitter, la ex mandataria aprovechó para cuestionar la “interminable timba financiera” que “invita capitales extranjeros a traer dólares golondrina para especular en mercado local y luego fugar divisas”.
El martes, el Banco Central dispuso un incremento de 150 puntos básicos en la tasa de Política Monetaria, que pasó a un nivel de 27,75 por ciento anual.
La senadora electa por la minoría en la provincia de Buenos Aires aseguró además que eso es un “reflejo de la visión que tienen los inversores extranjeros sobre el país: traen dólares para apostar por activos financieros, pero no para hacer inversiones en la economía real”.
En el mismo sentido, Marcó del Pont señaló que se asiste a una “lógica de bicicleta financiera a todo trapo” y que “lo más triste” es que “está promovida por la política pública, por el Banco Central, que con estos sucesivos aumentos de la tasa de interés ha generado una burbuja financiera muy costosa”.
En declaraciones radiales, Marcó del Pont señaló que ”estamos en una lógica de bicicleta a todo trapo y lamentablemente están todos pensando, los que tienen excedente o ahorros, cómo ganar más plata no produciendo, sino haciendo algún tipo de operatoria financiera”.
“POCO Y NADA”
Por su parte, José Luis Espert consideró que el Gobierno está “flasheando” (delirando) con los anuncios de reducción del déficit y de la inflación, y aseguró que el incremento de la tasa de interés de referencia del Banco Central “va a conseguir poco y nada”.
El economista aseguró que “hace 13 meses que la inflación está en 22 por ciento” e indicó que “el déficit fiscal no baja”, ya que “lo que baja es el primario, pero el financiero, que es el que importa, sigue subiendo”.
Por el contrario, el economista de la Fundación Libertad y Progreso, Aldo Abram, consideró que la suba de la tasa de interés “tiene que derivar en que la inflación baje”.
“Uno puede discutir cuáles son los instrumentos que son mejores o peores para sacar pesos del mercado, pero lo que nos está diciendo a todos es que va a ser menos expansivo en su política monetaria”, dijo Abram.
No obstante, se mostró cauteloso sobre la capacidad que pueda mostrar el Banco Central para cumplir con su meta inflacionaria, debido a que “en el segundo semestre de este año vamos a tener una inflación anualizada mas alta que la del segundo semestre del año pasado”.
El economista de la consultora Ledesma, Gabriel Caamaño Gómez, consideró que con la suba de tasas el Banco Central “lo que hizo fue reordenar la implementación de la política monetaria” y que el camino para bajar la inflación “no es gratis”, ya que “si no se avanza en lo fiscal, hay que tener tasas altas”.
Caamaño Gómez sostuvo que la política monetaria “se había desordenado en los últimos seis meses” y que con la suba al 27,75 de la tasa que dispuso el Banco Central el martes “se puso en línea con los otros instrumentos”. “Era el primer paso insalvable que tenía que dar, cualquier esfuerzo desordenado es menos eficiente que uno ordenado”, señaló al respecto, aunque advirtió que el Central “tiene otras decisiones por delante” para tomar, como resolver “qué hace con las metas” de inflación, para lo cual tiene dos opciones: “las mantiene formalmente pero no las persigue, o las cambia”.
Al respecto, Caamaño Gómez pronosticó que el rango de inflación del 8 al 12 por ciento fijado para 2018 “no se va a cumplir”.
LA COTIZACION DEL VERDE
Mientras tanto, el dólar logró sostener su cotización luego ceder nueve centavos en arranque de la sesión hasta los $ 17,70, pero con el correr de las horas reapareció la demanda y la cotización repuntó seis centavos.
Esa trayectoria se replicó en el mercado mayorista, donde la divisa experimentó un leve retroceso de medio centavo a $ 17,515, en el marco de jornada con un récord de volumen de negocios para el mes de octubre. Por su parte, el índice Merval en la Bolsa porteña cayó ayer 0,47% y cerró en 27.878,24 puntos, acompañando la caída generalizada de las bolsas externas e impactada en la plaza local por la suba de las tasas de referencia del Banco Central.