Editorial
AMÉRICA ECONOMÍA – Analistas de la Fundación Libertad y Progreso consideran que las subidas golpearán los países emergentes que necesitan de un constante financiamiento, además que las subas de las tasas influirán sobre el dólar en un contexto en el cual las monedas “se hayan en un vaivén”.
Buenos Aires. La economista argentina Natalia Motyl afirmó que las economías emergentes tendrán un impacto negativo si la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos se apega a la estrategia de alzas graduales de las tasas.
En una entrevista con Xinhua, la experta, analista de la Fundación Libertad y Progreso (LyP), se refirió a las recientes declaraciones del presidente de la Fed, Jerome Powell, quien señaló este viernes pasado que el banco central buscará manejar potenciales riesgos y apoyar la recuperación económica estadounidense mediante subidas graduales de las tasas.
“No es sorprendente el comunicado del último informe de la Fed sobre la necesidad de subir las tasas de interés próximamente. Lo más probable es que haya dos subas más hasta fin de año con el objetivo de evitar que se siga sobrecalentando” la economía de Estados Unidos, consideró la analista.
Motyl advirtió que Estados Unidos “se encuentra en vistas de una burbuja similar a la del 2007-2008, con bajos niveles de desempleo y una desaceleración en la creación de empleos influido por la política fiscal expansiva llevada a cabo por el presidente Donald Trump”.
“En julio el desempleo marcó su tasa mínima en términos históricos bajo un contexto en que las empresas presentan dificultades para encontrar gente para contratar, tanto calificada como no calificada, y eso presiona sobre el mercado laboral, a través de la suba de los salarios”, planteó la economista.
Motyl advirtió que Estados Unidos “se encuentra en vistas de una burbuja similar a la del 2007-2008, con bajos niveles de desempleo y una desaceleración en la creación de empleos influido por la política fiscal expansiva”.
La analista sostuvo además que “a pesar de que la inflación en Estados Unidos en el último período parece estar bajo control, lo cierto es que hemos podido observar cómo desde hace varios meses el índice de precios al consumidor, en términos interanuales, ha amenazado con rozar el 3%”.
“Es posible que, en los meses siguientes, la inflación supere el 3% para fin de año. A pesar de que algunos sectores como la energía o el de los materiales para la construcción, se benefician de una economía sobrecalentada, lo cierto es que un escenario en donde se pincha la burbuja no le hace gracia a nadie. Las alzas continuas de las tasas de interés de la Fed intentan proteger el crecimiento económico sostenido del país” norteamericano, afirmó Motyl.
En ese contexto, la experta advirtió que esa política “impacta negativamente sobre el resto de los países”.
“Esto sucede ya que la integración de los mercados internacionales hace que los diferenciales de tasas de interés sean cada vez más chicos y las decisiones de políticas monetarias en un país grande presione sobre el resto de los países dependientes de crédito”, añadió.
En la visión de la analista, “una suba en las tasas de interés (por parte de la Fed) implica que a un país le va a costar más endeudarse. Sobre los países emergentes estas subas presionarán sobre el alza del dólar”.
“Esto golpea sobre los países emergentes que necesitan de constante financiamiento y que verán cómo les costará más tomar un crédito. Por otra parte, las subas de las tasas de interés influirán sobre el dólar en un contexto en el cual las monedas emergentes se hayan en un vaivén”, expresó.
Este miércoles, Argentina volvió a enfrentar una abrupta subida del dólar, que saltó 2,60 pesos por unidad para terminar en 34,50 pesos para la venta al público, de acuerdo con la cotización del Banco Nación (entidad oficial), lo que representó un aumento de 8% frente a la jornada anterior.
Ante los signos de volatilidad, el presidente de Argentina, Mauricio Macri, reconoció el miércoles que hay “expresiones de falta de confianza en los mercados” sobre la capacidad del país para lograr financiamiento el año que viene.
Motyl subrayó que “aquellos países más vulnerables, como Turquía y Argentina, verán cómo ante una suba de las tasas de la Fed todos correrán a refugiarse al dólar en contra de los activos locales. Septiembre será un mes clave, en el cuál se sabrá si realmente la Fed decide subir las tasas o jugar con fuego y dejar que la economía actúe en un contexto de sobrecalentamiento”.
Este viernes, en un simposio económico anual en Jackson Hole, Wyoming, el titular de la Fed señaló que el banco central enfrenta dos riesgos principales: “moverse demasiado rápido y reducir innecesariamente la expansión o moverse demasiado lento y arriesgarse a un desestabilizador sobrecalentamiento”.
“Veo el actual modelo de aumento gradual de las tasas de interés como la estrategia del CFMA para tomar en serio ambos riesgos”, dijo, refiriéndose al Comité Federal para el Mercado Abierto (CFMA), el comité de elaboración de políticas de la Fed.
En su intervención, Powell dio a entender que es probable que la Fed siga aumentando gradualmente las tasas de interés porque la economía de Estados Unidos “es fuerte” y la inflación se encuentra cerca del objetivo de dos por ciento del banco central.
La Fed aumentó en junio las tasas de interés por segunda ocasión en el año y programó otras dos alzas para el año. La mayoría de los participantes del mercado esperan que el banco central eleve las tasas de nuevo en septiembre y diciembre.