VISIÓN LIBERAL – “Poneme la competencia que quieras. Ese no es el problema”, desafió el empresario industrial Gustavo Lázzari en su disertación durante el debate ¿Se debe liberar el comercio? organizado por la Fundación de Responsabilidad Intelectual (FRI).
El referente de La bondiola que se convirtió en carne picada por culpa del Estado, mostró una vez más los estragos que la carga impositiva hace sobre el empresario y los trabajadores. “Prefiero cualquier frigorífico italiano al frente, el mejor español en la esquina y el francés en la otra antes que ingresos brutos, impuesto al cheque, que mis obreros no tengan educación, que la ART nos reviente con sus tasas”.
Aunque el evento organizado por FRI sucedió hace unos meses, la prédica de Lázzari y otros empresarios del sector es constante.