Miembro del Consejo Académico de Libertad y Progreso.
Muchos católicos están muy contentos conmigo por la charla que voy a dar el Martes. Pero no por las libertades individuales. Y muchos defensores de la ideología del género, cuando les digo que el problema son las libertades individuales, me miran como si estuviera hablando de Marte.
Es difícil explicar cuál es el problema con la ideología del género porque se ha perdido la noción de las libertades individuales.
Querido pro-ideología de género: si piensas que el sexo es opcional, pensalo; si quieres hablar con e, hablá, o hablé, o lo que quieras; si te sientes mujer y quieres cortarte el pene, córtatelo, si eres Florencio y quieres llamarte Florencia, llámate, y si quieres enviar tu hijo a un colegio con educación sexual, mándalo.
Pero no, no te basta con ello. Lo que quieres es que YO piense igual o soy un homofóbico cuasi-delincuente, lo que quieres es que YO hable con e; lo que quieres es que YO te llame Florencia so pena de ir preso, lo que quieres es que todos los padres hagan lo que vos harías.
Allí es donde violás (sí: violación) las libertades individuales.
¿Por qué?
Porque las libertades individuales consisten en que el estado no puede imponerte coactivamente tu sexo, tu manera de pensar, tu manera de hablar, ni tu pene si no lo quieres.
Y por lo tanto, tú tampoco me puedes imponer a mí nada de eso, ni yo a ti.
Pero no te basta.
No, porque te estoy hablando de Marte, ¿no?
¿Cómo que cada uno hará lo que quiera -católico también- porque el estado no va a imponer una determinada forma de pensar?
Oh!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
¿Cómo que hay seres humanos que tienen derechos, y NO mujeres, homosexuales y trans, o sea “colectivos” explotados que por ende tienen el derecho y el deber de defenderse por la fuerza de los blancos heterosexuales explotadores?
Oh!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
¿Cómo que los blancos heterosexuales tienen derechos? Claro, porque todos son HUMANOS ANTES de ser homo, hetero, varón, mujer, blanco o amarillo.
¿What?
Sí: se llama liberalismo.
El debate NO es católicos versus teoría del género.
El debate es una vez más, liberalismo contra autoritarismo.
