Por Edwuind Pérez Palmar.
No más de dos años encontré en mis libros una pequeña publicación de de la colección Aula Abierta Salvat, la cual es una editorial española. El pequeño libro se llama “Revoluciones del Mundo Moderno”. En él, se explican procesos de alto impacto en el cambio de estructuras de poder en distintas partes de Europa y América; el recorrido va desde la Revolución Industrial, la Independencia de los Estados Unidos, la Revolución Francesa y los procesos independentistas de la América Hispana.
A todas estas, hubo una cita que marcó mi memoria, “En 1811, en Caracas, la ciudad americana más influida por el Liberalismo, debido sobre todo a las acciones llevadas a cabo por la Sociedad Patriótica organizada por Bolívar” (Aula Abierta Salvat 1980:22), queda claro en esta cita, que muchas de las ideas surgidas de la Independencia de los Estados Unidos y de la Revolución Francesa guiaron los procesos de independencia que lideró Caracas en inicio del siglo XIX, las hoy más antiguas democracias del mundo (Estados Unidos y Francia) tuvieron un gran impacto en influenciar las ideas de libertad y progreso en Venezuela y otras naciones de Suramérica.
Por ello entender un poco la historia de Venezuela, obliga a revisar las verdaderas raíces repúblicas de este país. Venezuela tiene bases históricas fundadas en ideas republicanas importadas de occidente, de por si Venezuela es un país muy occidentalizado y no por imposición ajena, sino más bien porque su historia va ligada a la historia moderna de occidente. Es por ello que, al nacer como república este país tiene un legado heredado de las revoluciones más importante del mundo moderno: Independencia de los Estados Unidos y la Revolución Francesa.
Esto lo digo con insistencia porque se demuestra así, que la nación venezolana es amante de la libertad y la democracia, la sociedad de este país muy arraigada a sus valores republicanos siempre ha sentido una relación de cercanía con Europa y Norteamérica, así lo afirman los libros ya que, si se revisa un poco de historia económica, se encuentra que durante el siglo XIX, Venezuela en su condición de país agroexportador (café y cacao) tuvo como principales socios comerciales a Inglaterra y Alemania; iniciando el siglo XX, durante la irrupción de la economía petrolera los principales socios comerciales fueron Estados Unidos e Inglaterra.
Es evidente, que este país ha construido su historia en función de su geografía, ¿cómo es eso?, sencillo, geográficamente Venezuela está localizada en el hemisferio occidental, por tal motivo, las influencias de occidente en orden de ideas, economía, política y sociedad siempre tendrán un arraigo de identidad por occidente. Esto que digo no es mero capricho de un liberal, es una realidad histórica que no se puede ocultar, por ello, en la nación venezolana las ideas de tipo marxista, socialista, comunista no iban a calar en una sociedad cuya historia va ligada a las prácticas de la libertad, la democracia, la abundancia y la prosperidad.
Mucho se quiso pretender en aplicar a la fuerza, políticas populistas que situaran al país en una condición de sociedad pasiva, condenada a la miseria, a la pobreza y a la humillación ideológica mediante métodos fieros de intimidación e imposición de valores ajenos a la historia venezolana. En ningún momento en los documentos historiográficos se refleja que los valores originarios y republicanos de Venezuela sean de fundamentos marxistas, comunistas que solo tienen cabida por la fuerza en países con regímenes tradicionalmente autoritarios como Rusia, China, Cuba, Nicaragua entre otros.
Es por ello que historia y geografía juegan un papel importante a la hora de entender a Venezuela. Es necesario revisar que ideales permitieron el surgimiento de la Venezuela republicana, sin duda las ideas de mayor referencia fueron las de la Independencia de los Estados Unidos y la Revolución Francesa. En el orden geográfico, Venezuela está localizada en el hemisferio occidental, por tanto, es de naturaleza venezolana tener una estrecha relación con países occidentales.
Por tal motivo, recientemente entendí un mapa publicado por el portal web del Diario ABC de España (ver figura Nº 1), donde se identifican los países que apoyan y los que no apoyan el proceso que actualmente se está produciendo en Venezuela. Países prósperos, desarrollados, libres y democráticos como Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Israel, Australia, el bloque de países de la Unión Europea y los países latinoamericanos que recientemente han entendido que el socialismo no desarrolla a las naciones también han mostrado interés por alinear su apoyo a Venezuela: Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Panamá, Perú, Costa Rica, Paraguay, República Dominicana, Guatemala, Honduras.
En cuanto a los que apoyan al régimen socialista y localizados en el hemisferio oriental, con quienes no compartimos ni orígenes, ni historia, ni relaciones comerciales históricas, con gobiernos autoritarios cuyas economías no son las más prosperas, donde sus poblaciones viven constante crisis y las políticas que aplican no son nada ejemplares están: Rusia, China, Turquía, Siria e Irán y de manera aislada en el continente están México, Bolivia, Cuba y Nicaragua.
Es en ese sentido cuando intento explicar como la localización geográfica de Venezuela definen su cercanía a países del mismo hemisferio en el que nos localizamos, países democráticos, desarrollados y prósperos, que ofrecen acertadas políticas de salud, educación y que permiten el comercio para generar la prosperidad a sus poblaciones, es esa la relación que hago entre localización geográfica y la realidad actual de Venezuela. Cuando hablo de historia simplemente hago alusión que esta nación no es comunista, socialista ni mucho menos le agrada vivir en pobreza y miseria. La evidencia histórica de los orígenes republicanos de Venezuela así lo demuestra.
La Geografía y la Historia son importantes para entender por qué es necesaria una Venezuela libre de ideologías fallidas y fracasadas al atraso y la miseria. Con este acontecimiento que hoy se vive en Venezuela, se redefinen las posiciones de países y se reconfigura una geopolítica que abre las posibilidades de una Venezuela miembro del lobby de naciones que buscan la riqueza y la prosperidad de su población bajo el esquema del ya consolidado Orden Mundial democrático y libre.
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Bibliografía
AULA ABIERTA SALVAT. 1980. Revoluciones del Mundo Moderno. Barcelona-España: 64 p.
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