Manuel Solanet, analista económico de la Fundación Libertad y Progreso, dialogó con FM Vos (91.5) y Diario San Rafael sobre el panorama financiero dentro de la compleja actualidad del mercado nacional e internacional y sobre la incidencia de los resultados electorales.
En un desafío al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, China hundió el lunes el yuan y disparó el temor a una “guerra de divisas”. Sin embargo, ayer hubo un aparente respiro a aquella moneda. Si bien se mantiene estable en siete unidades por dólar (su menor nivel en 11 años), no ha registrado movimientos importantes. Aquello tuvo –según Solanet– un efecto contagio en todos los mercados emergentes, incluido el argentino. “Estados Unidos anunció que ampliaba la protección de los productos provenientes de China con un arancel adicional de hasta 300 mil millones de dólares de importaciones y China dejó devaluar el yuan, lo que significó una respuesta dura ya que es una forma de protegerse y crear más competitividad a sus exportaciones. Eso nos ha repercutido en un momento crítico, porque estamos frente a elecciones”, explicó.
Respecto del trabajo que está realizando el Banco Central en virtud de los acuerdos tomados con el Fondo Monetario Internacional (FMI), para intervenir frente a estas situaciones, el analista expresó que “ha ayudado a que el tipo de cambio se mantenga casi inalterado o con pocas variaciones en los últimos meses”. “Hay gente que se queja de que la inflación todavía existe, lo que puede producir un retraso cambiario, pero el dólar todavía está más alto que en los promedios históricos reales, y hay margen para que el Banco Central haga lo que viene haciendo en los últimos tres meses”, señaló, y agregó que “si bien la política del Central es criticable –porque las tasas de interés son altas–, no se pueden manejar todas las variables al mismo tiempo: si uno quiere que el tipo de cambio no se escape, tiene que sacrificar algunas otras variables, como las tasas de interés que se pagan”.
Expresó además que “no ve con preocupación que se pueda escapar el tipo de cambio por lo menos hasta fin de año”, aunque influirá si hay un cambio o no de gobierno con las elecciones. “Yo creo que la alternativa Fernández–Fernández en los campos económicos se considera ‘riesgosa’, dados los 12 años pasados, con medidas que contribuyeron a deteriorar nuestra economía”, opinó.