Gabriel Zanotti – Jorge Bergoglio tiene razón. La deuda externa pública es un endeudamiento perverso. Los gobernantes gastan más de lo que pueden, luego toman deuda externa ante el FMI y el Banco Mundial
Martín Krause dice que aunque la Ley de Economía del Conocimiento haya sido aprobada de forma prácticamente unánime en el Congreso, esta unanimidad no generó una seguridad duradera para las inversiones, pues se mantiene el consenso de delegar poderes al ejectuvo para que este reparta beneficios.