MOMARANDU – Destacan que las reservas internacionales brutas están compuestas por Encajes de los dólares de bancos de los particulares y empresas; Swap con China; Obligaciones con Organismos Internacionales; Depósitos del Tesoro Nacional, y Dólares que le pertenecen al BCRA.
De acuerdo al relevamiento que hizo iProfesional entre economistas, el consenso absoluto es que el nivel real de reservas disponibles oscina entre u$s5.000 millones y los u$s11.000 millones, ya que depende mucho de qué tipo de activos se considera para un uso inmediato.
De hecho, un reconocido economista y ex funcionario dijo a este medio pidiendo anonimato: “El verdadero nivel de reservas es un misterio que jamás pude conocer”.
Al respecto, Juan Luis Bour, economista jefe de FIEL, le dijo a iProfesional que si las reservas brutas al último día de mayo (u$s42.589 millones) se les restan los pasivos en moneda extranjera (DEG, Encajes, y organismos internacionales), que suman u$s14.200 millones, quedan u$s28.400 millones.
Ahora bien, Bour agrega que hay otros pasivos por u$s22.411 millones por los swap con China, entre otros.
“Lo que deja unos u$s6.000 millones. Pueden tomarse sólo una parte de los pasivos y estás en u$s9.000 millones disponibles. Pero lo importante no es tanto el monto (bastante exiguo), sino que la evolución es endógena a la política”, reflexiona el economista de FIEL.
Por lo tanto, “el neto podría ser más bajo, o más elevado, si se usan los recursos prestados por China o si se pudieran ´tradear´ los DEGs (no líquidos)”, concluye Bour.
Desde la perspectiva de Geretto, si bien en el corto plazo las reservas brutas son el stock que tiene disponible el Banco Central a mano, “es muy importante el concepto de reservas netas”.
“Esto es, a las reservas brutas se le restan las reservas ´prestadas´ que tiene el BCRA, para que de ese modo se vislumbren las reservas realmente propias de la entidad”, afirma.
Es decir, para Geretto, la importancia radica en que “tarde o temprano ciertos componentes que se contabilizan dentro de las reservas brutas tienden a ser transitorios (por ejemplo, un préstamo), o en momentos de crisis se correlacionan con las tensiones del mercado de cambios, que es justo cuando más reservas se necesitan para afrontar dichas tensiones”.
A modo de ejemplo, la salida de depósitos en dólares tiende a incrementarse en momentos en que el dólar se dispara.
En cifras, si a las reservas brutas actuales de casi u$s43.000 millones se les restan el swap con China (u$s18.200 millones), los encajes en dólares que tienen los bancos en el Banco Central (u$s11.190 millones), y el préstamo del Banco de Pagos Internacionales (BIS) (u$s2.700 millones), “se tienen reservas netas en el orden de u$s10 mil millones, calcula Geretto.
En este sentido, Mariela Díaz Romero, economista Senior de la consultora Econviews, detalla que “las reservas netas del Banco Central se componen de las brutas netas de pasivos”.
Por lo tanto, coincide en que los principales pasivos en dólares son los mencionados anteriormente, y en que las reservas netas rondan los u$s11.000 millones.
Con este panorama, el poder de fuego oficial se limita. Por ejemplo, según analistas privados, se estima que entre mayo y abril pasados la autoridad monetaria debió vender más de u$s1.500 millones en el mercado para calmar la demanda y falta de oferta. Más allá que en el corriente mes algo puedo recuperar la entidad monetaria.
“La intervención cambiaria pesa sobre las reservas netas. En junio, el Central corrió de escena a la demanda de dólares para importaciones, poniendo trabas adicionales para que los importadores no adelanten pagos, como había pasado en mayo. De esa manera, a comienzos de mes el BCRA pudo retomar la compra de reservas”, resume Díaz Romero.
Dentro de los pronósticos que indican que el nivel es aun inferior a lo reflejado antes, para Cachanosky las reservas internacionales netas del Banco Central se encuentran en alrededor de u$s5.000 millones, lo que es tan sólo un 11% de las reservas internacionales brutas, “un nivel sumamente bajo”.
“Vale la pena aclarar un punto adicional. Existen en oro (no dólares), aproximadamente u$s3.400 millones, que algunos analistas suman al nivel de reservas netas. Por lo que, tomando este monto, las reservas internacionales netas ascenderían a casi u$s8.500 millones. Sin embargo, se podría poner en tela de juicio esto porque no es tan sencillo transformarlas en dólares líquidos”, acota el economista de Fundación Libertad y Progreso.
Ahora bien, la tranquilidad o no que brindan las cantidades netas disponibles dependen de la lupa con la que se las mire a las reservas.
“Por tanto, si consideramos que el PBI de Argentina en 2019 cerró en casi u$s449.000 millones, tendremos que las reservas brutas son menos del 10% del PBI, mientras que las netas menos del 2,5% del PBI, los cual son niveles bajos”, alerta Geretto.
Según Santiago Lucca, CEO de Bergson, “el swap con China se puede afectar sólo a exportaciones bilaterales entre los dos países. En tanto, el préstamo del FMI y los fondos del BID no son de libre disponibilidad, con lo cual se le acotan las posibilidades del intervenir en el mercado de cambios y contener un desborde como los sufridos durante el último Gobierno”.
En este contexto, Geretto afirma que los controles cambiarios en el corto plazo han aliviado la sangría, “pero están lejos de resolver los problemas de fondo, originados en un bajo flujo exportador, lo cual llevaría a analizar problemas como la inestabilidad macro e institucional, el déficit fiscal con alta carga tributaria, alta inflación, entre otras cuestiones. Salir del default debería ser solo un paso de un largo camino por recorrer”.
Al respecto, Bour cuenta que las restricciones generan brecha, “la brecha genera expectativa de devaluación, eso acelera compras y posterga ventas, hasta que devaluás. La obligación de usar dólares propios para importar es una componente más del ´no te vendo´. Eso más la indefinición sobre deuda y la vaguedad del ´programa económico´ potencian exceso de demanda”.
En ese ítem, Díaz Romero agrega a iProfesional que, con el reperfilamiento de los vencimientos en dólares bajo Ley local en abril, el Gobierno “se ahorró pagos por unos 10 mil millones de dólares, y este año no efectuará pagos de bonos en dólares bajo Ley extranjera, por la restructuración de la deuda bajo default”.
De esta manera, sostiene que los pagos de bonos en dólares no afectarán a las reservas netas este año, pero que sí se verán afectadas por los pagos de deuda con organismos multilaterales (excepto Club de París).