Economista de Libertad y Progreso
En una nueve medida, el Gobierno a publicado la resolución de la secretaria de comercio interior, denominadas SIPRE (Sistema Informativo para la Implementación de Políticas de Reactivación Económica), en el cual le solicita a más de 1000 empresas industriales, de construcción y comercio, informar los precios y cantidades de los productos vendidos y todos los stocks que tienen. Según la reglamentación, solamente apunta a tener más información, para poder desarrollar las políticas económicas. Solamente pedir y brindar esta información es un gran costo y riesgo para las empresas, pero además abre la puerta a peligros mayores.
Esto no es novedoso en Argentina, ya que los gobiernos anteriores, ya tienen programas similares, fracasando en reducir la inflación, pero generando problemas y costos. Las principales implicancias de esta resolución son:.
- Aumento innecesario de burocracia. Cada empresa deberá destinar personal a contabilizar e informar, en un sistema puntual, toda la información solicitada. Esto es tiempo, energía, personal, dedicado a no producir o generar valor. Los supermercados y comercios ya lo hacen por el programa SEPA, esto es más amplio y alcanza a más sectores.
- Pide información mensual por producto, cuando los precios van variando día a día, por región, por zona, por tamaño del producto, por tarjeta, por promociones, es muy difícil calcular. Muchos precios varían con el volumen, logística, forma de pago. No hay un precio único por producto.
- En el artículo 2, piden que toda la información sea sin IVA o impuestos internos. Cuando en muchos productos alcanzan un 50% del precio final. Y no aclaran si incluir o no los impuestos internos trasladados. Ejemplo ingresos brutos o impuestos a costos logísticos. O impuestos en la cadena de valor. En ese sentido, van a medir a las empresas, por un precio irreal.
- Es información privada y estratégica. No hay garantía de que se cuide y se preserve, ya que miembros del actual gobierno ya han usado información privada, para atacar a críticos.
- Mucha de esta información ya está disponible, en el programa SEPA del 2016 para comercios mayoristas, precios cuidados, leyes anti monopólicas. No han servido en el pasado, pero ahora quieren ampliarlo a sectores industriales y de construcción..
- No está claro todavía, cómo va a ser el sistema de carga. Especialmente depende si hay que poner información agregada o por cada establecimiento o boca.
- Aunque digan que sea solo para pedir información, esto puede ser usado en caso de aplicarse para poner más controles o intervenciones estatales.
- No resuelve el problema de la inflación, sino que todo control extra, termina generando más aumentos de precios o faltantes.
- Argentina necesita menos controles o burocracia, menos impuestos, no más.
Por último, hay que destacar los riesgos de que el Gobierno quiera entrar en mayores niveles de control, con más información. Ya se sabe del fracaso de todos los intentos de los Gobiernos que quisieron controlar los precios y cantidades de la producción y el comercio, no funcionó con la mano de hierro de la Unión Soviética. El peligro, no es solamente que destruye la economía, menos empleos, menos inversión, menos consumo, más pobreza; sino que además puede terminar con un control absoluto del Estado sobre las personas, aplastando todas las libertades civiles.
Algunos creen que esto solamente afecta a las grandes empresas, pero si controlan a las grandes empresas, después van por las medianas, las pequeñas y terminan controlando todo. No nos dejemos engañar. El riesgo es real, y cada nuevo avance con más poder para el Estado y menos para los privados, hace que sea más difícil de desarmar. Hay que frenarlo.