IPROFESIONAL – El dólar blue transita la semana previa a las elecciones a pura fiebre: este jueves el precio volvió a subir y llegó a los $206,50. Este es el valor nominal más alto registrado hasta el momento; es decir, un nuevo récord histórico. Sin embargo, más allá del elevado valor, lo que genera alarma es que se estiró otra vez la brecha con el dólar “solidario”.
El dólar minorista oficial cerró este jueves a $105,79, por lo que el dólar real que los ahorristas pueden comprar vía home banking (al que se le suma la carga impositiva) quedó en un promedio de $174,55.
De esta manera, queda configurada una diferencia de $31,95 entre el billete oficial y el blue, lo que lleva a muchos argentinos a preguntarse si con eso se puede lograr alguna ganancia.
Ahí es donde aparece el denominado “dólar puré“. En la jerga, “hacer el puré” es la transacción que resulta de comprar los dólares oficiales que permite el cupo mensual en el mercado formal (en este caso, u$s200 por mes y por persona) para luego venderlos, a un precio mayor (dólar blue), en el mercado paralelo o informal (cuevas).
El origen del término no está demasiado claro, aunque podría deberse a la mezcla de diferentes tipos de dólar -algo habitual en la crisis de 2001-, a modo de “puré”.
Brecha
Con las cotizaciones de este jueves 11 de noviembre, el puré deja una ganancia de unos 5.690 pesos, utilizando el cupo completo de los u$s200 por persona.
Para obtener esa renta, se necesitan unos $34.910, que es el equivalente de u$s200 al precio del “solidario” en esta jornada ($174,55).
La brecha del 26% entre el dólar oficial y el blue genera que muchas personas recurran al “puré” para ganar un poco de dinero
Luego, el ahorrista que se aventure a un lugar donde se intercambie blue no recibirá $206,50 por cada billete, porque ese es el precio al que los cueveros venden. En las cuevas se paga en promedio por cada uno de los billetes unos $203,50 (precio de compra de este miércoles, pero puede ser menos, dado que es un mercado informal), lo que resulta en $40.600 cash. En consecuencia, se obtiene una utilidad de $5.690, o del 16,3%.
La renta obtenida hoy es considerable, pero todavía se encuentra muy lejana del furor del puré en la segunda mitad de 2020, cuando se obtenían retornos superiores al 30%.
Por la brecha cambiaria, cada vez más personas recurren a esta maniobra
Cómo funciona
La maniobra persiste aunque no haya demasiada gente en la calle por la cuarentena total: los “arbolitos” siguen actuando vía delivery con algún taxi o alguna moto.
En este momento, la diferencia de cotizaciones la vuelve atractiva a pesar de las dificultades del aislamiento. Mientras el oficial sube por “goteo”, de a unos pocos centavos diarios en el mercado mayorista, el dólar blue llegó a los $174, por las mayores restricciones en otros mercados -el oficial y el bursátil, más cercados por el cepo- y la incertidumbre económica por la deuda que dispara un deseo de dolarizarse.
El “puré” persiste, pero otras maniobras para obtener ganancias de la diferencia de tipos de cambio ya fueron reguladas. El “rulo” -una maniobra legal- consistía en comprar bonos en dólares a precio oficial y venderlos en el MEP o dólar “bolsa”, que tiene una cotización más alta.
La obligación de cumplir con un “parking”, dejar “estacionados” los títulos antes de poder venderlos, un requisito que la volvió menos atractiva por la volatilidad de precios que puede haber en ese período, limitó la operatoria.
Por qué se dispara el dólar blue
Respecto a las causas que llevan al incremento acelerado del dólar informal, los economistas coinciden en que existe una multiplicidad de factores.
“Hay un caldo de cultivo que es que hay mucho dinero dando vuelta en la economía, mucha liquidez, y se acentuó este efecto en el últimas semanas por la emisión monetaria para financiar el déficit fiscal”, advierte a iProfesional el economista Camilo Tiscornia, director de C&T Asociados.
Y a esto agrega un hecho más preocupante, que es “una evidencia que hay un freno en los plazos fijos. Es decir, la gente está dejando dinero a la vista, plata más liquida todavía”, para evaluar cuáles son las medidas que pueda tomar el Gobierno y, en base a ello, decidir qué hace con su dinero.
En resumen, para Tiscornia, se vive en un contexto que es “muy complejo” por las elecciones, debido que nadie sabe qué va a suceder luego de las mismas.
“Hay una incertidumbre enorme, por lo que hay que esperar al lunes a ver qué pasa”, finaliza este analista.
Por su parte, Natalia Motyl, economista de fundación de Libertad y Progreso, también resalta que la escalada del blue se debe a la incertidumbre que están generando las elecciones.
“Hay una crisis de confianza por la falta de reformas estructurales, que se agudiza en periodos políticos de gran inestabilidad, respecto a lo que puede pasar a futuro. En definitiva, hoy a la gente le parece barato el precio actual del dólar, entonces intenta unos días antes de las elecciones cubrirse por temor a que vuelva a subir después del 14 de noviembre”, detalla la experta.
Es decir, la incertidumbre lleva a la mayor demanda de divisas, en un contexto en que la oferta es escasa y un profundo cepo cambiario, algo que explica la suba del valor del dólar en estos últimos días.
