A24 – La aceleración de la inflación preocupa a los consumidores. Por ello, desde el Gobierno quieren combatir este fenómeno con distintas iniciativas, una de ellas, por ejemplo, es la creación de una empresa nacional de alimentos, aunque aún se espera qué puede suceder en materia inflacionaria. Sin embargo, para conocer cómo seguirá el nivel de precios durante los próximos meses, A24.com consultó distintos especialistas.
Las expectativas inflacionarias para el primer semestre del año “no son positivas”. En ese punto coincidieron los expertos consultados por A24.com, quienes también alertaron que la consecuencia directa de este fenómeno se verá en la pérdida de poder adquisitivo, especialmente durante la primera parte del año.
Aldo Abram, director ejecutivo del centro de investigación “Libertad y Progreso”, afirmó que la inflación de este semestre va a ser alta. “Si bien se moderó la emisión de pesos durante la primera mitad del año pasado, durante el segunda el Gobierno emitió mucho para ponerle platita a la gente. Se esta depreciando fuerte nuestra moneda“, sostuvo. Y sentenció, “los precios en la góndola van a subir, tal como los estamos viendo. La suba de tarifas también va a pegar durante el primer semestre”.
Por su parte, Maria Castiglioni, directora de C&T Asesores Económicos, proyectó que “en los próximos meses las perspectivas para la inflación no son positivas. De hecho, si se mantuviera la inflación al ritmo de enero, la primera quincena de febrero estaría en un 3,5% con alimentos aumentando un 5%. Sobre todo, hay una inercia muy fuerte en las primeras semanas”.
En esta línea, destacó que los alimentos tuvieron una aceleración de los precios en los últimos meses, pero no fueron el rubro que más incremento registró. Por lo que, no sería un problema particular de estos productos sino algo más bien transitorio.
En tanto, Sebastián Menescaldi, director asociado de la consultora EcoGo, contó que en los próximos meses impactarán en los precios el descongelamiento del tipo de cambio, y las subas de tarifas y combustible. “El gobierno tiene que blanquearlo. Nadie da expectativas, y hay que ver qué elige como ancla para que no se dispare la inflación”, dijo.
Asimismo, Daniel Marx, economista y exdirector del Banco Central, hizo hincapié en la estabilización de la economía como factor determinante para bajar de la inflación. Y agregó: “Con la actualización en el valor de los servicios la inflación va a ser alta”.
¿Qué puede pasará con los alimentos?
En relación con el rubro alimentos, Menescaldi señaló que parte de la suba de alimentos frescos es temporaria, y que los precios “deberían revertirse entre febrero y marzo cuando aparezca la oferta de otro lado del país”.
En este sentido, el director de Economías Regionales de CAME, Pablo Vernengo, alertó que el precio de los alimentos frescos -como frutas y verduras- dependerá del clima, las sequías y las horas de riego.
Por su parte, Abram opinó: “Si se acelera el aumento del tipo de cambio mayorista, también se acelerará el ritmo de subas de los alimentos. Es el costo de la baja artificial para generar votos en las elecciones. Gratis no fue, lo vamos a pagar durante el primer semestre de este año”.
Se espera que más allá de las subas en alimentos que se están registrando por encima de la inflación, durante el 2022 el sector acomode sus valores.
¿Sirve crear una empresa nacional de alimentos para combatir la inflación?
Por último, en relación con la propuesta oficial de crear una empresa nacional de alimentos, Castiglioni explicó a este medio que “luce un esfuerzo del Estado totalmente equivocado”. Y amplió: “El país no tiene un problema de oferta productiva. De hecho, tiene una producción primaria de granos, oleaginosas, carnes para alimentar no sólo a la población argentina sino al resto del mundo. También tiene muchas empresas que producen alimentos”.
En este sentido, sostuvo que es una idea que no tiene asidero, ya que “el problema de la inflación se resuelve a nivel macroeconómico”. En este orden, amplió “no es un problema particular de una empresa sino un problema general” por el exceso de pesos en la economía y su consecuente depreciación.
El Gobierno quiere crear una Empresa Nacional de Alimentos (Foto: Telam).
Por su parte, Manescaldi coincidió en que el punto de conflicto no son las empresas alimenticias porque hay una producción descentralizada. “No creo que sea una propuesta que permita solucionar la inflación en los precios de los alimentos. El problema pasa por otro lado, que es la cuestión del equilibrio macroeconómico, las expectativas, las formas de financiar al gobierno, los precios internacionales, el tipo de cambio”, indicó en diálogo con A24.com.
Pablo Vernengo evaluó la iniciativa con buenos ojos siempre y cuando “la búsqueda del precio de referencia apunte a generar un precio justo en favor de los quinteros”. Contó que hay mucha triangulación y presión tributaria, por lo que a los productores debería asegurárseles una renta fija