BAE NEGOCIOS Aldo Abram, sostuvo que el levantamiento del cepo cambiario podría concretarse antes de las estimaciones de la mayoría de los economistas y analistas financieros, si se cumplen una serie de requisitos que permitirían comenzar con una unificación de los tipos de cambio, para luego “ir desarmando las regulaciones en la medida que se pueda”.
En declaraciones a BAE Negocios, Abram evaluó que “con la baja del impuesto PAIS y si se aplica una política monetaria consistente, sacando los pesos que sobran, se podría ir tranquilamente en octubre a una unificación cambiaria con un salto pequeño en el tipo de cambio”.
Diferencias con el resto
La confianza de Abram contrasta con la de la mayoría de sus colegas, que prevé que en el curso de 2024 no habrá novedades en cuanto a las restricciones cambiarias, pero para el profesor de Eseade hay que “aprovechar las próximas semanas que quedan hasta el inicio de octubre, como para ir recuperando el valor de nuestra moneda y que la brecha vaya a niveles similares a los que tenía en abril. Y si es menor, mejor”.
En su análisis, puntualizó que el levantamiento será parte de un proceso, en el que “hay que ir a la unificación cambiaria como primer paso cuanto antes y luego ir desarmando las regulaciones en la medida que se pueda”.
Regulaciones kafkianas
Esa supresión paulatina de las restricciones obedece a que “el marco de regulaciones que dejó el gobierno anterior es kafkiano y no se va a poder eliminarlo de inmediato”, dijo.
Abram sostuvo que el Gobierno del presidente Javier Milei “considera que mantener un cepo es negativo para la economía y que cuanto más se mantiene en el tiempo es peor” y que si bien en ese aspecto coincide con lo que pensaba el expresidente Mauricio Macri en 2015, a diferencia de este no puede levantar el cepo de inmediato porque “recibió un Banco Central muchísimo más quebrado”.
Las razones del oficialismo
En un intento de explicar las razones por las que el Gobierno no avanzó con el levantamiento de las principales restricciones cambiarias, Abram interpretó que en el oficialismo “habrían argumentado que ‘hay un montón de gente que está apostando a que nosotros trastrabillemos, para pegarnos un empujón y que nos caigamos’, entonces cada paso que vamos a dar va a ser un paso firme’”.
“Creo que tuvieron una oportunidad para salir entre marzo y abril, cuando hubo brechas cambiarias muy bajas que les permitían salir con un salto menor”, estimó, “pero, lamentablemente, esa oportunidad se perdió y ahora tienen que gestarla de nuevo, haciendo que el peso recupere el valor que perdió en mayo y en junio porque se emitió más de lo que la gente demandaba”.
Recuperar el valor del peso
Abram planteó que tras la ampliación de la brecha “ahora hay que recuperar el valor de la moneda, sacando los pesos que están de más e ir a busca una brecha que sea como la de marzo/abril, o menos, para hacer factible la unificación cambiaria y después ir de a poco desarmando el resto de las regulaciones”.
“Ese debería ser el camino -aseguró-, hoy no están dadas las condiciones, porque todavía hay pesos excedentes”, pero los cambios a concretarse en septiembre a partir de la rebaja de diez puntos porcentuales en la alícuota del impuesto PAIS y su impacto en la paridad cambiaria.
Por esa razón, Abram consideró que si, además se aplica “una política monetaria consistente”, se podría “ir tranquilamente en octubre a una unificación cambiaria con un salto pequeño del tipo de cambio”.
