LA NACIÓN.- Esto acaba de llegar de Ginebra: Las Naciones Unidas no tienen un plan para tomar control de Internet. Los helicópteros negros que buscarían robarse la Red no han salido del hangar.
Los teóricos de la conspiración para apoderarse de Internet se sentirán desilusionados. La última teoría, alimentada por grupos de “Internet abierta”, compañías como Google y algunos legisladores estadounidenses, sostenía que burócratas dedicados a cliquear el mouse en la sede de la ONU en Ginebra, con el apoyo de gobiernos que desconfían de Estados Unidos, planeaban tomar control de Internet.
El complot sería algo así: en una reunión en diciembre de un ente oscuro de la ONU llamado Unión Internacional de Telecomunicaciones, Rusia, China y sus amigos tratarían de quitar la supervisión de Internet de las organizaciones públicas y privadas que ahora cumplen con esta tarea , traspasando esta responsabilidad a la UIT. De allí derivaría todo tipo de cosas malas, desde la censura hasta la división de Internet.
Para el mes pasado estos temores ya estaban a niveles tan afiebrados que legisladores estadounidenses presentaron una resolución reclamando a su gobierno a que bloqueara propuestas que “justificarían mayor control gubernamental de Internet bajo leyes internacionales y rechazarían el actual modelo de múltiples interesados que ha permitido el florecimiento de internet”.
Vinton G. Cerf , el “principal evangelista de internet” de Google, alertó durante las audiencias en el Congreso: “La Internet abierta nunca ha estado más en riesgo que ahora. Se está preparando una nueva batalla internacional, batalla que determinará el futuro de Internet”.
EL CULPABLE: UNA REUNIÓN DE LA UIT
Los discursos alarmistas dieron lugar a titulares en cables y blogs, tales como “Estados Unidos alerta que el plan de la ONU para controlar Unternet debe ser detenido” y “Estados Unidos reitera resistencia a ocupación de Internet por UIT-ONU”
Es hora de ver qué pasa en realidad. Documentos preparados para la reunión de diciembre, que se filtraron la semana pasada -sí, en Internet- muestran que no hay propuestas de entregar el control de la red a la UIT. La Unión insiste en que no tiene deseos de cumplir ese rol.
Y si bien algunos gobiernos querrían dar al ente mayor poder regulatorio, Estados Unidos y otros países con posturas similares podrían bloquearlos fácilmente.
“Sería equivocado y un poco tonto hablar de que la UIT ‘tome control’ de Internet”, escribió en su blog Milton L. Mueller, un profesor de la universidad de Syracuse que es autor de Ruling the Root: Internet Governance and the Taming of Cyberspace (Gobernar la raíz: gobierno de internet y domar el cíber espacio). “Es más bien que Internet está tomando control del mundo de las telecomunicaciones, estableciendo cada vez más los términos y condiciones bajo los cuales funcionan la UIT y sus entes operativos”.
Quienes hacen campaña por una Internet abierta dicen que esto no significa que no haya motivos para preocuparse al acercarse la reunión de diciembre, llamada la Conferencia Mundial de Telecomunicaciones Internacionales . La reunión fue llamada por la UIT, entre cuyos miembros se incluyen 190 países y cientos de compañías de telecomunicaciones y tecnología, para actualizar un tratado de telecomunicaciones internacionales que tiene que ver con cuestiones técnicas como por ejemplo cómo conectar llamadas entre países.
“Si bien no creo que esto represente una ocupación por la ONU de Internet, al modo en que se lee en la blogósfera, algunas de las propuestas van al corazón de cómo viaja la información en Internet” dijo Sally Shipman Wentworth, alta funcionaria para política pública de la Internet Society . “Incluso pequeños cambios en la redacción podrían tener un impacto considerable”.
El pacto existente data de 1988, cuando Internet estaba en su infancia y las telecomunicaciones en muchos países eran aún el dominio de monopolios controlados por el estado. El texto que se prepara para la reunión, a realizarse en Dubai, incluye varias cláusulas relacionadas con Internet, incluyendo medidas para contrarrestar el spam y aumentar la ciberseguridad.
Pero el texto no incluye propuesta alguna que modifique las funciones centrales de gobierno de Internet, que son manejadas por grupos como la Corporación de Internet para Nombres y Números Asignados (Icann es la sigla en inglés), la Fuerza de Tareas de Ingeniería de Internet y el Consorcio de la World Wide Web . Icann, por ejemplo, supervisa el sistema de nombres de dominios mientras que los otros grupos desarrollan y mantienen normas técnicas.
“Es una lástima que el Congreso dedique tanto de su valioso tiempo a algo que ni siquiera está planteado” dijo Hamadoun Touré, secretario general de la UIT. “No hay una sola referencia al gobierno de Internet en el documento preparatorio”.
Icann ha irritado a gobiernos de todo el mundo, incluyendo el de Washington, con iniciativas para expandir la gama de direcciones de internet disponibles. Recientemente creó un nuevo dominio de máximo nivel para pornografía, usando el sufijo .xxx. Esta semana la organización dio a conocer las propuestas de cientos de nuevas extensiones de dominio. El proyecto aumenta en mucho la gama de direcciones ofrecidas, pero los críticos dicen que podría llevar a la violación de marcas registradas.
El año pasado, Vladimir V. Putin, entonces primer ministro y ahora presidente de Rusia, alimentó los temores de una disputa del control cuando dijo durante una reunión con Touré que su objetivo era establecer el “control internacional de Internet, usando las capacidades de monitoreo y supervisión de la Unión Internacional de Telecomunicaciones”.
Docenas de gobiernos han presentado propuestas para el nuevo tratado. La mayoría de estas no han sido difundidas públicamente, falta de transparencia que ha alimentado los temores respecto de lo que podría debatirse en diciembre. Algunas de las normas propuestas, tal como se ve en el texto borrador, son ciertamente alarmantes para grupos que defienden la libertad en Internet. Una propuesta daría a los gobiernos el derecho de controlar el ruteo del tráfico de telecomunicaciones internacionales que se originen dentro de sus fronteras. Los críticos dicen que esto podría facilitar la censura por regímenes represivos, aunque normas de la UIT, apoyadas por Estados Unidos, ya permiten la censura.
Como sea, los analistas dicen que es extremadamente improbable que la administración del presidente Barack Obama, que repetidamente ha declarado su apoyo a una Internet abierta, esté dispuesta a firmar un tratado que permita la represión a las comunicaciones en Internet o una expansión del rol de control de la ONU.
“La mayoría de los miembros de la UIT coinciden con nosotros a este respecto” dijo en su testimonio ante el Congreso Philip L. Verveer, coordinador para comunicaciones internacionales y política de información del departamento de Estado. “No hay propuestas para investir a la UIT con autoridad directa de gobierno sobre internet”.
Algunos analistas dicen que lo que realmente hay en juego es dinero.
LA NEUTRALIDAD DE LA RED, EN JUEGO
Robert M. McDowell, miembro de la Comisión Federal de Comunicaciones (conocida por la sigla FCC) le dijo a un comité de la cámara baja del Congreso de los EE.UU. el mes pasado que sabía de propuestas respecto del tratado que podrían permitir a compañías de telecomunicaciones extranjeras imponer aranceles a Google, Facebook, Netflix y otras compañías de Internet de Estados Unidos que usan mucho ancho de banda. Esto sería “devastador para la actividad económica global” dijo.
La Asociación Europea de Operadores de Redes de Telecomunicaciones, un grupo de presión con sede en Bruselas, ha reclamado que el tratado permita el manejo del tráfico de las telecomunicaciones. Las compañías de Internet se oponen en general a esta idea, reclamando en cambio ” neutralidad de las redes “, la idea de que debe darse igual prioridad a todo tráfico, desde las simples llamadas de voz hasta el video que utiliza mucho ancho de banda.
El tratado “debiera reconocer los desafíos de la nueva economía de Internet y los principios de que se reciba compensación justa por tráfico y los ingresos de los operadores no deben desconectarse de las necesidades de inversión causadas por el rápido crecimiento del tráfico de Iinternet”, dijo la asociación de operadores en una presentación ante la UIT. Por tanto el verdadero conflicto no es por el gobierno de Internet, dicen algunos analistas, sino por el reparto de las ganancias, buscando los operadores de telecomunicaciones internacionales usar a la UIT para extraer ingresos de las compañías de internet estadounidenses.
“La gente que apoya la Internet abierta es muy astuta al presentar esto como un intento de la ONU de tomar control” escribió Mueller, que ha hecho trabajos contratado por la UIT y por una variedad de compañías de telecomunicaciones y organizaciones de Internet. “Quizás sería mejor presentar la cosa como un ataque retrógrado a la liberalización en las telecomunicaciones internacionales”.