FORTUNA – Para los economistas, el 2018 parece desenrollarse como un pergamino que no encierra malos presagios. Crecimiento moderado, inflación alta pero con tendencia a la baja, déficit fiscal en parábola descendente, inversión cautelosa, dólar planchado y una balanza comercial que persistirá en rojo.
Salvo la aparición de algún Cisne Negro, un viento de trompa que se especula podría llegar únicamente del flanco externo, todo hace suponer que el país romperá el maleficio y crecerá también en un año no electoral.
Para tener en claro el panorama de lo que vendrá FORTUNA consultó a diez especialistas: Aldo Abram (titular de la consultora Exante); Andrés Asiain (director del CESO); Daniel Marx (director de Quantum Finanzas); Fabio Rodríguez (socio de MyR Asociados); Fausto Spotorno (economista de OJF y Asociados); Gabriel Zelpo(economista jefe de Elypsis); Juan Luis Bour (economista de FIEL); Martín Vauthier(economista de EcoGo); Ramiro Castiñeira (economista de Econométrica) y Rodolfo Santángelo (director de Macroview) proyectaron el 2018, con luces y sombras.
En esta primera nota, sus pronósticos sobre crecimiento.
l CRECIMIENTO
Abram: “Viene bien perfilado para 2018. Increíblemente, pese a la incertidumbre del proceso electoral, tuvimos un segundo semestre muy bueno en cuanto a crecimiento de la actividad en 2017, lo cual generará un efecto de arrastre. El crecimiento es un promedio del año, pero también se mide punta a punta, y las buenas cifras de fin del año pasado tendrán un impacto positivo en el actual. Estimamos que el PBI crecerá en torno al 4%, con un mínimo del 3,5%. Pienso que este año el sector servicios puede mostrar una firme recuperación, sobre todo en el área del comercio. Hasta ahora el consumo creció muy poco en las grandes ciudades, aunque sí lo hizo en el interior. En 2017 tuvimos el fuerte crecimiento del sector financiero, pero ahora crecerán otras ramas del rubro servicios”.
Asiain: “Creemos que la economía va a crecer poco, tal vez un 1,5%. En eso nos diferenciamos de las proyecciones del resto. El impulso lo dará la construcción del sector privado, el rubro servicios y el consumo. Caerá la obra pública y se sentirá el impacto de las paritarias negociadas a la baja con respecto a la inflación”.
Marx: “Continuará con el impulso que ha tenido durante todo 2017. Estimamos que el PBI puede experimentar una mejora del 3% en 2018, desde un marco en el cual se acentuará la demanda. Habrá un mayor ingreso de inversiones. El Gobierno aplicará el esquema de Participación Público Privada para darle continuidad al ritmo de las obras y financiarlas. Sin dudas, los sectores más pujantes serán la construcción, el agro y los servicios”.
Rodríguez: “Lo veo muy parecido a lo que ocurrió el año pasado, con un nivel que será del 3%, aunque con algunos desafíos que no son menores. La economía tiene que cambiar el motor que le da impulso. En 2017 el crecimiento fue dado en parte por el consumo y también por la fuerte participación del sector público, mientras que este año el déficit fiscal obliga a realizar un recorte de 1 punto que lógicamente le quitará recursos a la economía. El sector privado debe cobrar mayor vigor y tener más protagonismo. La obra pública no desaparecerá, pero habrá una clara desaceleración”.
Spotorno: “Lo vemos bien, somos optimistas, aunque la economía no crecerá tanto como el año pasado. Nuestra proyección es de 2,5%, lo cual es muy bueno igual teniendo en cuenta de que se trataría del segundo año consecutivo de crecimiento. Sería la salida de ese largo período de 7 años en que la economía estuvo estancada. Los sectores que encabezarán esto serán la construcción privada y una mejora de la industria”.
Zelpo: “El crecimiento puede estar por encima del registrado en 2017, fundamentalmente porque habrá un arrastre estadístico importante, que puede ser del 1,4%. Es decir que, de acuerdo a nuestras proyecciones, la economía puede crecer 3% durante 2018”.
Bour: “El crecimiento no estará arriba de 3,5% este año y dependerá del comportamiento de las inversiones. Estimamos un repunte de la construcción privada y de la industria. El agro también tendrá un buen año, pero su crecimiento será menor. La minería es una incógnita. La Participación Público Privada le dará un impulso a las grandes obras. También se registrará un buen crecimiento en servicios, fundamentalmente comercio, transporte, comunicaciones y el sector financiero”.
Vauthier: “Proyectamos que la economía crecerá 2,1% este año, básicamente compuesto por el incremento del consumo privado, la construcción y las inversiones. Si tenemos en cuenta que 1,2% es arrastre del 2017, entonces podemos ver que no será un crecimiento vigoroso. Nuestras proyecciones surgen del análisis de cuatro ejes: ingresos, política fiscal, política monetaria y crédito”.
Castiñeira: “Creo que en este punto hay un consenso entre todos los economistas, que en general proyectamos un crecimiento del 3% para la economía este año. Incluso existe una coincidencia con el Gobierno, que proyecta el mismo porcentaje en el presupuesto. El crecimiento continuará motorizado por el sector agropecuario, pero identifico en el sector aeronáutico, a partir de las Low Cost, un rubro que puede mover la economía a partir de una mayor venta de pasajes y la necesidad de contar con mejor infraestructura. Igualmente la macroeconomía tiene problemas y aquí bailamos todos juntos”.
Santángelo: “Será la primera vez en seis años que lograremos dos años consecutivos de crecimiento del PBI. El año pasado fue de rebote y este lo podemos llamar de recuperación. El crecimiento oscilará entre el 2,5 y el 3%. Todo dependerá de si se acelera el proceso inversor, porque ya sabemos que las exportaciones continuarán rezagadas”.