En diálogo exclusivo con La Mañana, el economista Aldo Abram, Director Ejecutivo de la Fundación “Libertad y Progreso”, afirmó que la inflación anual de 2019 superará el 35%, teniendo en cuenta que según sus estimaciones, el primer semestre mostrará un descenso de la escalada inflacionaria, con un incremento de entre el 2 y el 3% en los primeros seis meses, mientras que en la segunda mitad del año los costos se incrementarán por una probable modificación en la cotización del dólar, en un contexto de incertidumbre por el escenario electoral.
“Para el segundo semestre, es probable que exista una nueva fuga de capitales, y que muchas personas recurran al dólar. Por ello, el peso se depreciará y la inflación tenderá a ser más alta en esa época del año. Esto luego se reflejará en los precios de los bienes y servicios”, explicó Abram a este diario.
“A mi entender, el dólar no está ‘atrasado’, y debería estar más bajo. Pero la falta de certezas, que será muy alta en los meses en los cuales se desarrollarán las elecciones, la mayor parte de la ciudadanía querrá desprenderse de sus pesos. Según los informes del Mercado de Cambios del Banco Central, durante los últimos meses la mayor parte de las compras de dólares se efectuaron por un promedio de u$s10.000, por lo cual son los ahorristas comunes quienes se deshacen de sus pesos y hacen subir la divisa norteamericana, porque confían más en esa moneda; y cuando existe incertidumbre, los argentinos apuestan a lo que más les genera confianza”, agregó.
A su vez, el profesional anticipó que la recuperación económica este año será “lenta”, y que en parte provendrá de los ingresos que aporte el sector agropecuario, aunque se calcula que la contribución de las cosechas será menor a la esperada en un principio, a raíz de las inundaciones registradas en varias provincias del país en las últimas semanas. También, mencionó una posible reactivación en economías regionales que exportan sus producciones a Brasil.
Por ello, el licenciado evaluó que en las localidades cercanas a las zonas rurales más importantes de la Argentina comenzará a observarse una suba en los niveles de consumo privado.
En cambio, Abram aseveró que en los grandes centros urbanos y en otros puntos del país lo que se notará será un escaso consumo privado por la devaluación del peso y por lo que pueda suceder en el país a partir de diciembre. “Quien ya gasta poco, gastará menos aún en los próximos meses”, acotó.