PERFIL – Esta tarde, a las 17 y en el Museo del Bicentenario de la Casa Rosada, Sergio Massa jurará en su nuevo cargo de Ministro de Economía, Producción y Agro. SI bien el pidió expresamente en su cuenta de Twitter que no se hicieran especulaciones sobre los anuncios, hasta que los realice formalmente hoy, a las 19:30 horas en conferencia de prensa post asunción del cargo, ya comenzaron a circular versiones sobre las posibles medidas que tome en el arranque de su gestión.
El oficialismo apuesta a que la llegada de Massa le inyecte una cuota de oxígeno al gobierno de Alberto Fernández, que luego de la renuncia de Martín Guzmán como titular del Ministerio de Economía no logró contener la crisis cambiaria ni económica.
Se especula que en los anuncios de esta tarde el flamante superministro podría avanzar con la idea de un dólar diferencial para el agro, que aliente la liquidación de granos del sector y descomprima la falta de dólares; así como también decisiones para achicar el déficit fiscal y enfocarse en controlar el fuerte salto del costo de vida, para darle orden “a la mesa de los argentinos” y “recuperar un sistema de precios adecuado que permita volver a saber cuánto valen las cosas”.
PERFIL convocó a algunos economistas que anticipan los temas más calientes que encontrará Massa. Y en ese recorrido aparecen cuestiones como salir rápidamente del cepo, resolver los problemas de fondo de la macro con un plan a mediano plazo; achicar el gasto público y reducir el déficit, así como frenar la emisión, entre otras necesidades urgentes.
Aprender de los errores del pasado
Según Aldo Abram, director de la Fundación Libertad y Progreso “de mínima Massa deberá aprender de los errores del pasado lo que ha venido haciendo este gobierno con la maquinita al rojo vivo y el gasto público volando”. Según el economista esto se hizo de urgencia también en el 2021 con la pandemia para superar la situación crítica pero “eso no resuelve los problemas de fondo”
“Lo que resuelve los problemas de fondo es lanzar un programa de reformas estructurales de mediano plazo, de un par de años, muy detallado, para resolver el problema de un Estado que gasta excesivamente y que no le sirve a los ciudadanos y hacer un Estado más chico que le sirva a los ciudadanos y los ciudadanos lo puedan pagar”.
Además, para Abraham es importante solucionar el problema de la enorme presión tributaria de nuestro sector productivo “que lo están matando aunque ni así alcanzan a pagar el gasto público”. “Se quedan con la mayor parte del crédito del mercado local entre el BCRA y el gobierno. Además, como ni así alcanza, nos cobran un impuesto inflacionario enorme sobre nuestra tenencia de pesos fenomenal, que el mes pasado fue de casi el 8% y eso tampoco va mas” explicó. A todo esto, el director de Libertad y Progreso agregó la necesidad de “salir paulatinamente del super cepo”.
“Si no se resuelven esas cosas, sólo se tendrá un respiro al estilo de lo que fue sucediendo con Guzmán, pero con una crisis que irá agudizándose en 2023”, completó.
“Hay que resolver los problemas de fondo y salirse del cepo cuanto antes, porque el cepo nos va a llevar a una crisis en sí mismo, como los 21 cepos anteriores que terminaron en una crisis monetaria y cambiaria grave y tres de ellos en hiperinflaciones graves”.
Los subsidios y el impacto que tendrá la segmentación en las cuentas públicas
Para Damián Di Pace, “no queda otra que el ajuste del gasto público”, adelantó al tildar la situación actual de “muy preocupante”. En materia de subsidios el ajuste que se está proponiendo casi no tendrá impacto en las cuentas fiscales” vaticinó Damián Di Pace de la consultora Focus Market. Para el economista “El ahorro fiscal para el tercer cuatrimestre sería de 15 mil millones de pesos, aunque la proyección de ahorro anual hubiera sido de casi 100 mil millones de pesos, pero como esto se demoró. De acuerdo a la mirada de Di Pace esto no permite descomprimir el déficit fiscal y los subsidios se mantienen. además impacta sobre una cantidad muy baja de la población que pagará tarifa plena cuando en el interior ya hay mucha gente que paga tarifa plena. “Ahí hay una situación muy importante por solucionar”, estimó.
Respecto de la situación de las reservas del Banco Central indicó que están en una “muy mala situación”. “Vamos a pasar de un dólar soja que fue un fracaso a un dólar campo que seguramente será un desdoblamiento para incentivar rápidamente las liquidaciones de dólares”.
“Estamos en peor situación de 2021 con un déficit fiscal total que supera e 6%“, agregó. Para Di Pace, la gran incógnita será como buscará reducir el déficit fiscal “o ajusto gasto público o sigo endeudándome a través de emisión y colocación de deuda, o creo más impuestos. Hasta ahora este gobierno generó con Martín Guzmán 16 nuevos impuestos, y en los 24 días de Batakis, 2 nuevos impuestos. No está el clima para recargar impuestos”, explicó. Finalmente, para Di Pace el único camino posible para Massa será ajustar el gasto público. “No queda otra”, indicó. “La situación es realmente preocupante”, concluyó.
Plan de ajuste fiscal, si o si
Por su parte. también María Castiglioni de C&T Asesores Económicos puso el acento en la necesidad de ajustar. “El gran desafío es ver cómo logra un plan de ajuste fiscal de reducción del déficit que ataque al gasto público y que sea implementable y sostenible“, aseguró.
En la mirada de la economista, “Massa asume con un escenario muy complicado porque estallaron el esquema que había implantado este Gobierno de desequilibrios macroeconómicos. El corazón de esto es el gasto público que volvió a aumentar a récords históricos y un déficit fiscal que no se puede seguir financiando a pesar de que se renovó la deuda sin financiamiento externo, por lo que ya no tiene financiamiento en el mercado local porque la dinámica era insostenible”, comentó.
A esto sumó que que el Gobierno se está quedando sin capacidad de financiamiento con emisión monetaria por la reacción de esta práctica en la inflación.
“En este contexto, el súper cepo que se fue creando genera distorsiones muy grandes y una brecha cambiaria enorme, con un tipo de cambio oficial que está atrasado, lo que complica también el lado externo con un Banco Central que además de tener un montón de pesos, sigue perdiendo día a día reservas”, analizó.
Pero Castiglioni también reconoció que devaluar sin un plan de ajuste significa más inflación. “Los desafíos que tiene que afrontar Sergio Massa son, por un lado, ver cómo resuelve la pérdida de reservas diarias, cómo logra financiar el déficit fiscal, pero sobre todo, reducirlo que es el problema que genera todo esto”, aseguró, y agregó que en un escenario hipotético en el que consiguiera financiamiento, “no resolvería nada, más que conseguir un poco de tiempo, y vamos a volver a las mismas discusiones que tuvo Guzmán y que tuvo Batakis”, aseguró.
Finalmente, la economista señaló que en este contexto el gran desafío es ver cómo logra un plan de ajuste fiscal de reducción del déficit que ataque al gasto público y que sea implementable y sostenible. “Creo que si no se pone en acción un plan de estabilización y de reformas va a ser muy difícil cambiar este escenario”, completó Castiglioni.
La salida del cepo, otro de los grandes desafíos
Por su parte, para el Economista Jefe de FADA, David Miazzo, “Más allá del superministro, lo importante es atacar tres desequilibrios que se vienen profundizando”. En primer término mencionó el desequilibrio fiscal con un “déficit 55% superior al del año pasado en términos reales 1,3 billones oficiales + 400.000 millones de maquillaje = 1,7 billones, en sólo 6 meses”.
En segundo término se refirió al desequilibrio monetario con una creciente monetización del déficit, que erosiona el valor del peso de manera constante y creciente. “Hasta junio venía más o menos bien, pero luego implosionó el mercado de bonos en pesos”, y agregó que estamos frente a “Un balance del Banco Central sumamente deteriorado por toda la emisión pasada, hoy contenida en 7 billones de pasivos remunerados que genera intereses por una base monetaria completa por año”.
En tercer término, Miazzo puntualizó “un profundo atraso cambiario que genera la necesidad de un cepo cada vez más fuerte y desincentiva las exportaciones. El tipo de cambio de julio de 2020 es equivalente a $180 de hoy“, comentó.
“Hoy lo principal pasa por estabilizar la macro”, sintetizó Miazzo y en su explicación se refirió al atraso cambiario en especial para el campo, uno de los sectores que más aguarda medidas de incentivo. “Tenemos un dólar oficial sumamente atrasado. Por ejemplo, en los últimos 12 meses el maíz y la soja subieron entre 56 y 57% en pesos; mientras que los fletes (gasto en pesos) subieron 74% y los fertilizantes (gasto en dólares) también subieron un 35%. Hoy se necesitan 4,3 ton de maíz para comprar una de urea, cuando el promedio de los últimos 4 años era de 3,2 millones de ton”, aseguró, sin dejar de mencionar el problema que ocasiona la brecha cambiaria que se filtra a muchos de los precios.
Para el economista “Lo principal que puede hacer Massa es normalizar la cuestión cambiaria, cepo y todo eso, que es lo que está afectando más a la economía y al campo en particular, en tanto actividad exportadora“, cerró.
Medidas más, medidas menos, esta tarde, a las 19:30 se conocerán las primeras que tomará el flamante superministro de esta cartera tripartita que según expresó, buscará generar más dólares para el país.