En mayo, los trabajadores mejoraron con respecto a la inflación

Eugenio Marí
Jefe de economía de Libertad y Progreso

Jefe de economía de Libertad y Progreso. Profesor Economía Internacional en Universidad del CEMA, Profesor ayudante de Análisis Económico y Financiero en la Facultad de Derecho, Universidad de Buenos Aires,Asesor en la Secretaria de Comercio Exterior la Nación yAsesor Secretaria de Comercio de la Nación.

Mg. en Economía y Lic. en Economía Universidad del CEMA

ADN EMPRESARIO Sueldos por encima del IPC es el dato que alivia a los bolsillos de los trabajadores argentinos y puede contribuir con una leve mejora hacia los gastos familiares. Los trabajadores no registrados, que los años anteriores fueron los grandes perdedores, ahora también lograron superar la línea de la inflación.

Los salarios (8,3%) volvieron a ganarle a la inflación en mayo (4,2%), confirmando el rebote que habían iniciado en abril. Desde la Fundación Libertad y Progreso analizaron la situación del sector laboral y el impacto que la inflación tiene sobre los salarios.

“Esta vez, la brecha entre la suba de los salarios y el IPC superó los 4 puntos, dando cuenta de una aceleración en la mejor del poder adquisitivo. Con esto, el dato de INDEC confirmó lo que ya habían adelantado los indicadores de la Secretaría de Trabajo”, indicaron desde la entidad privada.

Para el economista jefe de la Fundación Libertad y Progreso, Eugenio Marí, “la baja del impuesto inflacionario, que ha sido el principal logro del gobierno en el primer semestre del año, es un alivio que impacta de lleno sobre el poder adquisitivo de las familias, en especial de los de menores ingresos o que trabajan en la informalidad”.

Al respecto, Marí señaló que “uno de los datos más importantes es que todos los componentes del índice de salarios estuvieron por encima del IPC, incluyendo los no registrados”.

En ese sentido, el economista recordó que los trabajadores no registrados, justamente, fueron los más afectados por la brusca aceleración de la inflación que hubo en 2022 y 2023, período en que sus salarios perdieron 41% de su poder adquisitivo”. Y agregó que “ahora, con la inflación bajando, empiezan a recuperar el terreno perdido”.

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