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El saqueo del Banco Central y la destrucción de la seguridad jurídica: un debate crucial para Argentina

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En Argentina, nos encontramos frente a un debate fundamental que separa dos visiones económicas en pugna. Por un lado, aquellos que justifican vaciar el Banco Central (BCRA) para aliviar las cuentas del Tesoro. Por el otro, quienes creemos en la necesidad de respetar la deuda del Tesoro con el BCRA, como un paso esencial para restaurar la seguridad jurídica, fortalecer la confianza y evitar un nuevo episodio de destrucción monetaria. Este debate no es meramente técnico: se trata de una discusión sobre el derecho de propiedad, el respeto por los contratos y el futuro del dinero en Argentina. Para entenderlo en profundidad, analicemos las consecuencias de ambas posturas desde la perspectiva de Law & Economics, una escuela que estudia cómo las normas e instituciones impactan en los incentivos y la eficiencia económica.

El vaciamiento del Banco Central: una expropiación encubierta

La idea de que el Tesoro puede simplemente desconocer su deuda con el BCRA bajo la justificación de que es una obligación intraestatal es un argumento falaz y peligroso. No es una simple reestructuración de pasivos dentro del sector público: es un repudio de deuda que equivale al peor default posible.

Desde una perspectiva de Law & Economics, esta decisión destruye la seguridad jurídica, un elemento esencial para el funcionamiento de cualquier economía. Como han señalado tanto economistas como Richard Posner, y juristas como Robert Cooter, la estabilidad de los derechos de propiedad y el cumplimiento de los contratos son pilares fundamentales para el desarrollo económico.

La idea de que el Tesoro puede simplemente desconocer su deuda con el BCRA bajo la justificación de que es una obligación intraestatal es un argumento falaz y peligroso

El BCRA, aunque sea una entidad pública, tiene activos y pasivos. Si el Tesoro desconoce su deuda con el BCRA, está eliminando activos de la entidad, lo que implica automáticamente perjudicar a sus pasivos, es decir, a quienes poseen letras del BCRA y, más gravemente, a todos los argentinos que tienen pesos. Al vaciar su respaldo, la moneda pierde valor y naturalmente se reduce la demanda de dinero.

Este mecanismo ha sido el eje de la inflación argentina durante décadas. No es un problema meramente fiscal: es un problema institucional. El ciclo de saqueo del Banco Central ha sido el método predilecto del populismo para financiarse, destruyendo la moneda en el proceso.

Es importante señalar que esta visión del vaciamiento del Banco Central no proviene solo del populismo, sino que ha sido defendida incluso por destacados economistas académicos como Carlos Rodríguez y Lucas Llach, a quienes respeto, pero con quienes disiento profundamente en este punto. Aunque el argumento de que se trata de una deuda intraestatal puede sonar atractivo en el corto plazo, las consecuencias de este enfoque son devastadoras para la seguridad jurídica y la credibilidad del país.

La alternativa: pagar la deuda y restaurar la credibilidad

Frente a esta visión cortoplacista, existe una alternativa mucho más sólida: el Tesoro debe pagar su deuda al Banco Central. Esto implica que el Estado deberá realizar un mayor esfuerzo fiscal para generar un superávit primario capaz de afrontar los intereses de esa deuda.

Aunque el argumento de que se trata de una deuda intraestatal puede sonar atractivo en el corto plazo, las consecuencias de este enfoque son devastadoras para la seguridad jurídica y la credibilidad del país

Desde la perspectiva de Ronald Coase y la eficiencia contractual, respetar los acuerdos previos es fundamental para evitar distorsiones en el mercado. Si el Tesoro cumple con sus compromisos, el BCRA podrá recomponer su balance y colocar sus reservas en activos seguros, como Letras del Tesoro de EEUU, obteniendo una rentabilidad similar a la que Argentina paga por su deuda con el FMI.

Esto permitiría avanzar hacia una política monetaria estable, permitiendo que se recomponga la alicaída demanda de dinero y evitando la tentación de seguir financiando déficits con emisión descontrolada. Más aún, un Banco Central saneado reduciría la incertidumbre sobre la estabilidad del peso, generando un entorno más propicio para el ahorro y la inversión.

Esta alternativa es la única que respeta los derechos de propiedad de los tenedores de pesos y genera los incentivos correctos para recuperar la confianza en la moneda.

¿Por qué una buena parte de los economistas argentinos justifican el saqueo?

Lamentablemente, en Argentina es probable que la visión de los saqueadores del Banco Central sigue siendo predominante. Muchos economistas locales parecen haber normalizado la idea de que el BCRA es un botín a disposición del poder político. Este pensamiento ha sido el germen de todas las crisis inflacionarias y cambiarias que hemos vivido.

Aquí es donde Law & Economics nos da una lección crucial: si una institución genera incentivos para el saqueo, entonces la única solución real es eliminar la fuente del problema. No basta con administrar mejor el Banco Central, porque siempre existirá la tentación política de volver a saquearlo. Como lo demuestran los estudios de James Buchanan sobre la teoría de la elección pública, los políticos siempre encontrarán la forma de abusar de un Banco Central que pueden controlar.

El Tesoro debe pagar su deuda al Banco Central. Esto implica que el Estado deberá realizar un mayor esfuerzo fiscal para generar un superávit primario capaz de afrontar los intereses de esa deuda

Por esta razón, hace años me convencí, junto con Emilio Ocampo y otros economistas, que la única solución definitiva para Argentina es dolarizar. Sin un Banco Central al cual recurrir para financiarse, los políticos se verán obligados a respetar el presupuesto y a equilibrar sus cuentas de manera genuina.

No se trata de una simple medida económica: es una reforma institucional que cambia radicalmente los incentivos. Si dejamos que el BCRA siga existiendo como una caja de financiamiento del Estado, será cuestión de tiempo hasta que un próximo gobierno vuelva a las andadas y destruya la moneda una vez más.

Dos caminos y una oportunidad histórica

El debate en Argentina no es solo técnico: es un choque entre dos modelos.

El del histórico saqueo del BCRA, desconociendo la deuda del Tesoro y el de respetar los contratos, pagar la deuda y avanzar hacia la dolarización para evitar futuros saqueos.

Hoy tenemos una oportunidad única. Con Milei, Trump y Elon Musk alineados, podemos reabrir el debate en EEUU sobre la dolarización, retomando la iniciativa del senador Connie Mack (1999) para compartir el señoreaje con países que adopten el dólar.

Argentina puede convertirse en un caso de éxito para América Latina, consolidando su estabilidad y reforzando su alianza estratégica con EEUU. Si seguimos por el camino del populismo, la historia se repetirá. Pero si aprovechamos este momento único, podemos dar el salto definitivo hacia la prosperidad.

El autor es director general de la Fundación Libertad y Progreso

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Argentina es la estrella en ascenso del Índice de Libertad Económica 2025

Por Rainer Zitelmann

Por trigésimo primer año consecutivo, la Heritage Foundation ha publicado el Índice de Libertad Económica, también conocido como el “Ranking del Capitalismo”. (Ver índice aquí)

Rara vez un país ha escalado tantas posiciones en el Índice de un año a otro como lo ha hecho Argentina. Aunque ocupa el puesto 124° entre 184 países, todavía se encuentra dentro del grupo de economías clasificadas como “Mayormente No Libres”. Sin embargo, en la edición del año pasado, Argentina ocupaba el puesto 145°, lo que significa que ha subido 19 lugares en solo un año. Es probable que esta mejora hubiera sido aún mayor si la recopilación de datos para el Índice no hubiera finalizado en junio de 2024.

El ascenso de Argentina se debe a las reformas económicas implementadas por Javier Milei, que inicialmente generaron un impacto temporal, pero que posteriormente han llevado a una reducción significativa de la pobreza.

El Índice afirma:
“La puntuación de libertad económica de Argentina es de 54.2, lo que convierte a su economía en la número 124 en el Índice de Libertad Económica 2025. Su calificación ha aumentado en 4.3 puntos respecto al año anterior, y Argentina ocupa el puesto 26 de 32 países en la región de América. La puntuación de libertad económica de Argentina sigue siendo inferior a los promedios mundiales y regionales. Registrando una de las mayores mejoras en puntuación, la economía de Argentina ha salido del nivel más bajo de libertad económica en el Índice 2025.”

“La elección en noviembre de 2023 del presidente Javier Milei, orientado a las reformas, ha proporcionado un impulso concreto para la revitalización de la economía argentina. Aunque la economía enfrenta desafíos formidables, la agenda de reformas económicas de Milei ha resultado en avances notables. La gestión de las finanzas públicas ha mejorado y se ha vuelto más disciplinada, con la reducción del tamaño y el alcance del gobierno a través de diversas reformas fiscales y regulatorias. La inflación ha estado disminuyendo y la estabilidad monetaria se ha fortalecido.”

El ascenso de Argentina en el Índice supera incluso el del país que más posiciones ganó el año anterior, Vietnam, que subió 13 lugares en el Índice 2024 en comparación con 2023.

En una comparación a largo plazo desde 1995, Vietnam ha ganado 23.5 puntos, más que cualquier otro país de tamaño comparable en el mundo (Estados Unidos ha perdido más de 6 puntos en el mismo período). Aunque Vietnam logró ganar otros 2.4 puntos este año en comparación con el año anterior, en términos relativos solo ocupa el puesto 61 de 184 países. Vietnam se encuentra en el puesto 11 de 39 países en la región de Asia-Pacífico. Su puntuación de libertad económica es superior a los promedios mundial y regional. Según el Índice 2025, la economía de Vietnam es considerada “moderadamente libre”.

“Aprovechando su integración gradual en el sistema global de comercio e inversión, la economía de Vietnam se está volviendo más orientada al mercado. Sin embargo, a pesar de la privatización parcial de empresas estatales, la liberalización del régimen comercial y el reconocimiento creciente de los derechos de propiedad privada, las deficiencias institucionales aún desalientan un desarrollo más sostenido.”

Vietnam demuestra una vez más el vínculo entre libertad económica y pobreza. A principios de la década de 1990, casi el 80 por ciento de la población vietnamita vivía en la pobreza según datos del Banco Mundial, mientras que hoy esa cifra ha disminuido a menos del 4 por ciento (ver fuente). Será interesante ver qué impacto tendrá en su clasificación en el Índice del próximo año la reciente reestructuración radical del aparato estatal anunciada por Vietnam.

Si observamos el Índice en su conjunto, poco ha cambiado en los grupos superiores e inferiores. Al igual que el año anterior, los países con mayor libertad económica son Singapur, Suiza, Irlanda, Taiwán y Luxemburgo, mientras que Venezuela, Cuba y Corea del Norte vuelven a ocupar los últimos lugares de la lista.

Contrario a las afirmaciones de los anticapitalistas, este estudio sobre el estado de la libertad económica en 184 países demuestra que más libertad económica, y no más regulación estatal o ayuda al desarrollo, es el único medio efectivo para aliviar la destrucción ambiental y la pobreza.

Esta conclusión se respalda con una comparación entre el Índice de Libertad Económica y otros índices económicos, como el Índice de Desempeño Ambiental de la Universidad de Yale. Los países clasificados como “Libres y Mayormente Libres” en el Índice de Libertad Económica tienen un puntaje promedio de 61.1, significativamente más alto que el puntaje de los países clasificados como “Reprimidos” (40.6).

Sobre todo, la pobreza es un problema en los países económicamente no libres, como lo demuestra una comparación entre el Índice de Pobreza Multidimensional de las Naciones Unidas (que incluye 104 países en desarrollo) y el Índice de Libertad Económica. En los países en desarrollo clasificados como mayormente o moderadamente libres, la tasa de pobreza es del 1.8 por ciento. En contraste, en los países categorizados como mayormente no libres o reprimidos, la tasa de pobreza es del 15.7 por ciento, casi nueve veces mayor.

En relación con el Índice, también es interesante analizar los patrones de migración de los refugiados: en su mayoría, los refugiados huyen de países con menos libertad económica hacia países con mayor libertad económica. Según datos del ACNUR, ocho millones de personas han huido de la Venezuela socialista en los últimos años (ver fuente). Solo los países en guerra han experimentado un éxodo mayor de personas. Y el 90 por ciento de quienes permanecen en Venezuela viven en la pobreza (ver fuente).

Será interesante ver el Índice del próximo año. Este año, Estados Unidos ocupa el puesto 26. Esto significa que hay 16 países europeos que superan a EE.UU. en términos de libertad económica. Sin embargo, esto no debe interpretarse como un respaldo a los países europeos, donde la libertad económica también está cada vez más amenazada. La clasificación más baja de EE.UU. se debe principalmente a su altísima deuda nacional, que es uno de los 12 criterios utilizados por los autores del Índice para clasificar a los países. Sin una reversión en la tendencia de su deuda nacional, Estados Unidos tendrá dificultades para mejorar significativamente su posición.

Rainer Zitelmann es autor de los libros Cómo las naciones escapan de la pobreza (ver aquí) y Los orígenes de la pobreza y la riqueza (ver aquí).

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Un mensaje optimista para invertir en un país en camino a la estabilización

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Por Javier Canosa, cordiandor del consejo legal en la Fundación Libertad y Progreso

En su discurso de inauguración de las sesiones ordinarias, el Presidente remarcó los logros durante el primer año de gestión, ratificó el rumbo, inauguró el año de la “Reconstrucción Nacional”, prometió enviar en breve el acuerdo con el FMI al Congreso y abrir más la economía

“Que vivas tiempos interesantes” dice un antiguo proverbio chino. Cuesta ser consciente del impresionante momento histórico que estamos viviendo. El país comenzó su reconstrucción. Quizás hoy no nos demos cuenta, pero cuando miremos hacia atrás identificaremos estos días como los días bisagra en donde aún no veíamos tan claro hacia donde estábamos yendo. Sospecho que el lunes los activos argentinos que cotizan en el exterior se apreciarán fuertemente. Argentina podría experimentar FOMO, o “Fear of Missing Out” (miedo a perderse algo), en el corto plazo.

Milei también explicó por qué abrir la economía beneficia sobre todo a los más pobres

En su discurso, el presidente insinuó una ley prohibiendo el déficit fiscal y el aumento de impuestos, no sólo a nivel nacional pero también a nivel provincial y municipal. Una ley así sería el equivalente a 10.000 RIGIs, una ley así sería un verdadero shock de confianza que atraería muchísimas inversiones. Si bien Argentina muchas veces ha borrado con el codo lo que escribió con la mano (ley de intangibilidad de depósitos sancionada dos meses antes de la “pesificación”), una ley como esa sería un verdadero magneto de inversiones y crecimiento.

Cada discurso de Milei es una clase de economía. Milei explica cosas de la economía que en muchos casos son contraintuitivas y difíciles de comprender si no se explican bien. Por ejemplo, la idea de que un país funciona como una gran familia en donde todos compartimos todo es romántica pero irreal; papá estado siempre se aprovecha.

Del mismo modo, la idea de que si nos cerramos y “vivimos con lo nuestro” nos beneficiamos todos tampoco es real. Esto lo explicó en 1817 el gran economista David Ricardo con su “teoría de las ventajas comparativas”; no sirve producir todos los bienes ya que no todos somos igualmente eficientes produciendo todos los bienes. Ni en el caso en que un país sea más eficiente produciendo todos los bienes, aún en ese caso conviene especializar la producción de bienes y servicios. Estas ideas, que sustentan la creación de muchos de los organismos de Bretton Woods en 1948 como la Organización Mundial del Comercio (OMC) no se comprenden o tienen mala prensa en la Argentina, ya que hace más de 70 años insistimos en tratar de “vivir con lo nuestro” a pesar de que la pobreza sigue creciendo. Milei explica todo esto mucho mejor que yo.

En su discurso, Milei también explicó por qué abrir la economía beneficia sobre todo a los más pobres. Instituciones sólidas y derechos de propiedad son la clave para salir de la pobreza. De la pobreza no se sale con más planes sociales. Estas verdades son duras, pero como diría Ayn Rand “puedes evadir la realidad, pero no puedes evadir las consecuencias de evadir la realidad.” El sábado, el presidente demostró que sabe lo que se necesita para que la economía crezca y el crecimiento económico es lo único que nos aleja de la pobreza. Con esa receta tan simple (impuestos bajos, estado pequeño, apertura comercial y propiedad privada) el País puede experimentar un crecimiento impresionante. Primero los mismos Argentinos que conocemos el fenomenal cambio de rumbo de primera mano, invertiremos en el País, pero luego, capitales de todo el mundo que están esperando reglas claras y esas simples recetas para acompañar el crecimiento del país, comenzarán a confiar en nosotros e invertir.

Los otros puntos sobresalientes del discurso presidencial:

  • Reducción de cantidad de impuestos y simplificación tributaria.
  • Nuevo régimen de coparticipación y competencia fiscal entre las provincias.
  • Mayor simplificación y desregulación laboral.
  • Límites al gasto público consolidado en el orden del 25% tal como fue acordado en el Pacto de Mayo.

Hay que pellizcarse; serán años de prosperidad nunca antes vista.

Como en otras oportunidades, el Presidente les prometió a los legisladores que acompañen estas propuestas, y les ofreció una “tabula rasa”, pero también agregó que no espera que acompañen ya que él quiere terminar justamente con los privilegios de la “casta” y es difícil (imposible) que la casta acepte autolimitarse.

Durante este poco más de año de gobierno de Milei las instituciones funcionaron a pleno, las pocas leyes que sancionaron debieron ser “mutiladas” en el Congreso para que puedan ser sancionadas. Propuso a jueces para la Corte Suprema (como lo indica la Constitución) y ante la inacción del Senado, los nombró en comisión. ¿Eso es ilegal? No, así lo prevé la Constitución (artículo 99 inciso 19), pero además, si lo fuera, no le habría tomado juramento al Manuel García Mansilla el actual presidente de la Corte, Horacio Rosatti. Como diría Thomas Jefferson “la Constitución es lo que los jueces dicen que es”.

Se lo acusa a Milei de gobernar por decreto. ¿Es esto así? Según un informe de la Universidad Austral:

  • En sus primeros 9 meses de mandato Milei dictó 39 DNU, colocándose en el cuarto lugar en la lista histórica, superado por Duhalde, Fernández y Néstor Kirchner, quienes emitieron 78, 60 y 51 DNU respectivamente en sus primeros nueve meses de mandato;
  • Fernández fue el segundo presidente que más DNU dictó desde 1994, con un total de 179 DNU dictados durante su mandato, ubicándose así solo detrás de Néstor Kirchner (que emitió un total de 237 DNU).
  • Si solo se considera el período de 17 años transcurrido desde la sanción de la Ley 26.122 (en el año 2006), Fernández es el presidente que más DNU dictó.
  • Fernández y Kirchner, en conjunto, dictaron casi la mitad del total de los DNU emitidos desde la entrada en vigencia de la reforma constitucional de 1994.

No sólo eso, sino que Milei es el único presidente a quien el Congreso le ha rechazado un DNU en la historia. ¡La casta unida jamás será vencida!

Escribo estas breves líneas porque algunas personas en las comidas familiares repiten lo que leen en los diarios y se muestran preocupados ya que piensan que estamos ante un estalinista o fascista que en cualquier momento cierra el Congreso. Yo les digo, tranquilos, Milei es el presidente más republicano que hemos tenido.

El Presidente no está violando la Constitución; y la República no está en peligro. Milei tiene muy claro lo que debe hacer; lo único que le recomendaría, si fuese el caso en que aún no ha pensado en ello, es que piense también en generar a su lado otros políticos como él, amantes de la libertad, de la República y de la Constitución; así este extraordinario momento que estamos viviendo con este Presidente no es sólo algo pasajero sino el comienzo de un verdadero y duradero camino hacia la libertad y país fuerte, realmente soberano y próspero.

Por eso, con todo respeto, le repetiría aquellas frases que le decían al oído a los generales romanos que festejaban un triunfo luego de una importante victoria militar: Respice post te! Hominem te esse memento! Memento mori, memento mori! [¡Mirá atrás y recuerda que sólo eres un hombre! Recuerda que vas a morir, recuerda que vas a morir].

El autor es socio de Canosa Abogados. Se especializa en asuntos relacionados con el derecho societario, tributario y financiero

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